Dalílah Polanco sorprendió con una confesión directa dentro de La Casa de los Famosos México. En una charla íntima con Facundo, la actriz admitió que siente que podría ser la próxima en abandonar el reality. Su declaración, cargada de honestidad y autocrítica, dejó entrever el desgaste emocional que implica la competencia.
“Creo que yo soy la que sigue”, expresó Polanco mientras ambos estaban en la cocina. La comediante, integrante del equipo Día, reconoció que la balanza se inclina hacia sus rivales del equipo Noche, quienes, en su opinión, han logrado mayor conexión con la audiencia.
El peso de la incertidumbre
La actriz explicó que no se trata únicamente de estrategia interna, sino de un fenómeno que escapa a su control: el voto del público. “No tengo idea quién es el público que vota… ¿son señoras, niñas, jóvenes? No lo sé. Eso es lo que me preocupa”, dijo con franqueza.
Polanco aseguró que, aunque desea llegar a la final, no descarta que su camino termine antes.
“Si no gano la salvación, está cabrón. Siento que nos van a ir sacando uno por uno por razones que ni siquiera conocemos”, reconoció, mostrando vulnerabilidad en medio del juego.
Entre la paz y la incomodidad
Más allá de la estrategia, la actriz reveló la lucha interna que enfrenta cada día dentro de la casa. “Ya no estoy feliz todo el tiempo, estoy más incómoda más de lo que quisiera”, señaló. Incluso confesó que prefiere salir antes de que el encierro termine por sacar “lo peor” de su personalidad.
Consciente de que el reality es un experimento social que confronta emociones y límites personales, Polanco se mostró reflexiva: “Si alguien me quita la paz, tengo que preguntarme qué hay en mí que no puedo manejar. Eso es lo que realmente me preocupa”.
El valor de resistir
A pesar de los momentos de vulnerabilidad, la actriz también reconoció el esfuerzo de quienes la apoyan desde fuera. “Siento que mi gente allá afuera se está rifando por mí, y eso me da fuerza para seguir”, expresó, destacando que el compromiso con sus seres queridos es una de las principales razones para permanecer en el reality.
Una experiencia transformadora
Lejos de victimizase, Polanco valoró lo que ha aprendido durante la competencia. Admitió que sus manías, obsesiones y carácter fuerte le han jugado en contra, pero también le han permitido crecer. “Ha sido un gran reto y también esperanzador. Convivir con tanta gente distinta me ha hecho ver que puedo enfrentar mis propios demonios”, compartió.
¿Destino marcado?
Dalílah Polanco no es ajena al riesgo de la eliminación y lo asume con serenidad. “Si salgo ahora, me iría feliz. Ya pasé la mitad del camino”, afirmó, mostrando una mezcla de resignación y gratitud.
El desenlace está en manos del público. Mientras tanto, la actriz continúa navegando entre momentos de calma, estallidos de sinceridad y reflexiones que la colocan como una de las voces más transparentes dentro del reality.
