
La repostería mexicana es famosa por su riqueza de sabores y tradiciones, y entre sus múltiples delicias destaca el flan de chongos zamoranos, una fusión única que combina dos postres clásicos: el flan tradicional y los chongos zamoranos, un dulce originario de Michoacán elaborado a base de leche cortada. El resultado es un postre suave, cremoso y con un sabor inconfundible que ha ganado popularidad en diversas regiones del país.
El flan de chongos zamoranos representa un homenaje a la cocina mexicana tradicional, al tiempo que ofrece una reinterpretación contemporánea ideal para sorprender en reuniones familiares, celebraciones o como una opción innovadora en reposterías y restaurantes. Su textura firme pero delicada y su dulzura perfectamente equilibrada lo convierten en un verdadero manjar.

Preparar este postre en casa no es tan complicado como parece. Con ingredientes sencillos y un poco de paciencia, cualquier amante de la cocina puede recrear esta delicia en su propia cocina.
¿Cómo preparar el flan de chongos zamoranos de manera sencilla?
Ingredientes:
- 1 taza de chongos zamoranos (pueden ser caseros o enlatados)
- 1 lata de leche condensada
- 1 lata de leche evaporada
- 4 huevos
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- ½ taza de azúcar (para el caramelo)
- Una pizca de canela en polvo (opcional)
Preparación:

- Prepara el caramelo: En una sartén a fuego medio, coloca el azúcar y deja que se derrita sin moverla hasta que tome un color ámbar dorado. Vierte con cuidado el caramelo en el fondo de un molde para flan o en moldes individuales, cubriendo bien la base.
- Licúa la mezcla: En una licuadora, mezcla la leche condensada, leche evaporada, huevos y vainilla. Si deseas un toque más especiado, añade una pizca de canela. Licúa hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
- Agrega los chongos: Incorpora los chongos zamoranos a la mezcla, sin licuar demasiado para conservar algunos trozos enteros. Esto le dará una textura más interesante al flan.
- Vierte y hornea: Vierte la mezcla sobre el molde con caramelo. Coloca el molde dentro de una charola más grande con agua caliente para hacer un baño María. Hornea a 180°C (350°F) durante aproximadamente 50-60 minutos, o hasta que al insertar un cuchillo en el centro, éste salga limpio.
- Enfría y desmolda: Deja enfriar el flan a temperatura ambiente y luego refrigéralo por al menos cuatro horas. Para desmoldar, pasa un cuchillo por las orillas del molde y voltea cuidadosamente sobre un plato.
El resultado es un flan cremoso, con notas lácteas profundas y un toque especial gracias a los chongos. Este postre une lo mejor de dos mundos y es perfecto para cerrar con broche de oro cualquier comida mexicana.