Paco Álvarez, esposo de Dulce María, defiende a Manuel Velasco, Anahí y su versión sobre presunto robo en RBD

Paco Álvarez, esposo de Dulce María, rompió el silencio sobre los señalamientos por presunto robo y abuso económico en el grupo RBD, defendiendo de manera enfática a Manuel Velasco –esposo de Anahí– y respaldando públicamente la versión de ambos sobre el destino de las finanzas relacionadas con el Soy Rebelde Tour.

A su llegada al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, Álvarez fue abordado por la prensa sobre el rol de los familiares directos en las finanzas del exitoso reencuentro de la banda pop. “Yo en lo personal, no me siento el indicado para hablar de eso. Sé todo el tema, lo conozco perfecto, pero yo no soy quien para hablar, es un tema del grupo, ellos deben dar los comentarios. Yo solo estaba con ella”, declaró el realizador, quien acompañó a Dulce María durante varios de los conciertos de la gira.

Al ser interrogado sobre si tuvo participación en los asuntos económicos, mencionó: “No, ni creo que él tampoco. En lo personal yo no tuve nada que ver, ni nadie de nosotros –Dulce María, Manuel Velasco y Anahí– creo que tuvimos algo que ver. Son ellos los dueños de su grupo y de la empresa que hicieron, nadie más tuvo que ver”.

La defensa de Álvarez surge en un momento de tensión para la agrupación formada en 2004 dentro de Televisa, debido a los recurrentes conflictos entre exintegrantes y la difusión de sospechas sobre la administración de los recursos generados en el reciente tour de reencuentro. El ambiente entre los miembros de la banda pop se ha visto tensado por publicaciones en redes sociales y declaraciones cruzadas.

En días previos, Andrés Tovar, productor de televisión y esposo de Maite Perroni, se enfrentó a una ola de críticas tras salir en defensa de su esposa ante las acusaciones de fans de Anahí y Dulce María. Tovar denunció públicamente la existencia de “abusos y robos” dentro de RBD y aseguró que Perroni no participaría en proyectos donde existieran estas irregularidades, enfatizando que sus valores están por sobre cualquier ganancia económica. El productor aprovechó para responder a los ataques recibidos en redes, tildando de “envidiosos” y “mediocres” a quienes difunden rumores sobre él y su esposa.

Las declaraciones del productor de TV Azteca, avivaron aún más la polémica, generando una división visible entre las diferentes bases de admiradores del grupo. La mayoría ha mostrado su respaldo a Dulce María y Anahí, mientras que la postura del esposo de Perroni ha sido rechazada e interpretada como una intervención excesiva en asuntos internos de las exintegrantes, situación que complica la posibilidad de una reconciliación pública.

La ruptura interna del grupo se evidenció recientemente con incidentes como la ausencia de Perroni en el festejo del cumpleaños de Dulce María, una señal pública del distanciamiento. También, las interacciones mínimas o nulas entre las integrantes en redes han dejado claro el enfriamiento de los lazos, lo que ha alimentado especulaciones sobre el futuro del grupo e impacta la planeación de proyectos como el documental de la gira “Soy Rebelde”.

Por otro lado, la fractura entre Anahí y Christian Chávez —quien fuera su amigo cercano— quedó expuesta tras la salida de la artista en defensa de su esposo, Manuel Velasco, ante los rumores de presunto desfalco millonario dentro de la banda. Si bien Chávez minimizó las acusaciones tachándolas de “chismes”, la respuesta de Anahí fue tajante: “No solamente son chismes. Es absolutamente falso”. La actriz y cantante apuntó además a un posible deterioro de su relación con Chávez, sugiriendo públicamente que la memoria se va perdiendo cuando esperaban mayor respaldo mutuo.

Todo apunta a que el futuro de RBD se encuentra en vilo: los desacuerdos internos y la presión mediática impiden pensar en una pronta reunión integral, mientras la incertidumbre sobre la gestión de los recursos sigue sin resolverse de manera transparente ante sus seguidores.