
Limpiar los cristales del hogar suele ser una de las tareas más tediosas porque siempre se busca que queden impecables para así permitir que la luz entre a cada rincón.
Aunque existen técnicas y productos profesionales para no fallar en la tarea, también se han hecho virales algunos ingredientes caseros que brindan resultados efectivos.

En este caso se trata del vinagre blanco, uno de los aliados favoritos en las tareas del hogar, pues es un producto que logra eliminar todo tipo de hongos y bacterias que pueden radicar en la superficie de cristal.
Cómo utilizar correctamente el vinagre blanco para limpiar los cristales
El vinagre blanco es muy utilizado para la limpieza del hogar por su capacidad para descomponer la suciedad, la grasa y los depósitos minerales gracias a su contenido de ácido acético. Además, es eficaz para eliminar malos olores, disolver residuos de cal, limpiar cristales y remover manchas.
Para su uso se recomienda mezclar en partes iguales el vinagre blanco y agua en un atomizador, de esa forma se tendrán mejores resultados, aunque en algunos casos también se puede agregar un poco de bicarbonato.
- Lo primero que se debe hacer es colocar la mezcla en una botella con atomizador.
- Posteriormente, se coloca sobre la superficie de cristal y con ayuda de una microfibra se comienza a limpar el cristal.
- Se recomienda dejar actuar la mezcla por cinco minutos para después comenzar a secar la superficie con una microfibra nueva.

Cabe mencionar que en la mayoría de los casos el vinagre no deja residuos tóxicos, no es corrosivo para algunos de los materiales y representa una alternativa económica y ecológica en comparación con los productos de limpieza convencionales.
Ventajas de tener los cristales del hogar limpios
Una limpieza regular de los cristales previene manchas permanentes causadas por lluvia, agua dura o polución, y prolonga la vida útil de las ventanas y ventanales. Además, unos cristales en buen estado mejoran la imagen del hogar y generan una sensación de orden y cuidado, por lo que las principales ventajas son:
- Permiten el paso óptimo de la luz natural, lo que mejora la luminosidad de los ambientes.
- Contribuyen a una mejor apariencia de la vivienda ante visitantes y desde el exterior.
- Facilitan la visibilidad hacia afuera, evitando manchas o marcas que puedan obstruir la vista.
- Reducen la acumulación de polvo, polen y otros alérgenos sobre las superficies de vidrio.
- Previenen el deterioro provocado por residuos de agua, polvo o contaminantes.
- Ayudan a mantener la higiene general del hogar y a evitar la proliferación de bacterias o moho en los marcos y esquinas de las ventanas.
