En la telenovela Regalo de Amor, la actriz Khia Peniche interpreta a Olga, una mamá que parece tenerlo todo, menos cercanía con su hija. En la historia, su personaje prefiere las compras y las amigas antes que estar con su familia.
Sin embargo, a lo largo de los capítulos, este personaje cambia y empieza a transformarse en una madre presente. Ese giro es lo que más emocionó a la actriz.
“Es un personaje muy bonito que deja muchas enseñanzas”, contó Khia en entrevista con INFOBAE MÉXICO. Asegura que Olga representa a muchas mujeres que, por diferentes razones, están desconectadas de sus hijos, pero que pueden cambiar si lo deciden.
“Termina siendo una mamá más como yo: pendiente de lo que siente su hija”, explicó la hija del actor Arturo Peniche, sobre este melodrama que se puede ver de lunes a viernes a las 18:30 horas por Las Estrellas.
¿Qué escenas son más complicadas en Regalo de amor para Khia Peniche?
Lo más complicado para Khia fue actuar en escenas donde su personaje muestra frialdad hacia su hija. “Ir a abandonarla con la suegra fue fuertísimo. Yo no soy así. Me dolió”, confesó.
Para construir el personaje, se basó en experiencias propias como mamá, pero también observó a otras mujeres. De cada una tomó algo, desde las más cercanas hasta las más frías, y con eso armó a Olga.
Regalo de Amor, producida por Silvia Cano y transmitida por Las Estrellas ha tenido una gran respuesta del público, señaló. Su historia gira en torno a la maternidad, la familia y la transformación emocional. La novela está protagonizada por Alejandra Robles Gil y Chris Pazcal.
Khia Peniche habla del impacto de Regalo de amor
Khia cree que este tipo de historias sí pueden cambiar la forma en que piensa la gente.
“Todo lo que se transmite por televisión tiene un impacto. Y si hay cosas buenas en la historia, hay que tomarlas para aplicarlas en la vida real”, resaltó.
Sobre cómo estudia sus escenas, Peniche comentó que necesita escribirlas a mano o imprimirlas, ya que no puede leerlas en la tableta. “Les doy unas dos o tres leídas y con eso ya me lo aprendí. Y en el set, con los ensayos, todo fluye”.
La actriz también habló sobre su postura como mamá en la vida real. Está convencida de que los hijos necesitan límites, aunque eso no siempre sea bien visto.
“Siento que ahora se les quiere evitar todo, no se les puede regañar ni hablar fuerte. Pero a veces es necesario decirles las cosas como son, con cariño, pero con firmeza”.
Una de las cosas que más la marcó recientemente fue una conversación con su hijo después de ver Intensamente 2. Él identificó a la ansiedad como una emoción propia.
“Me dijo: ‘Mami, traigo a la señora Ansiedad’. Y ahí te das cuenta de la importancia de hablar con ellos, de que sepan qué sienten y que se atrevan a decirlo”.
Khia aseguró que no hay mamá perfecta, pero sí se puede ser más cercana.
“Mamitas, intenten estar lo más cercanas a sus hijos, platiquen con ellos. Hay muchas veces que van y le cuentan a otra gente, creo que lo mejor es que puedan llegar con nosotros, los papás y contarnos todo, poder llorar con nosotros y poder decirnos que están frustrados”.
