
Una vez más, Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, logró evadir a las fuerzas de seguridad mexicanas. Lo que parecía otro enfrentamiento más entre grupos criminales y autoridades en el Bajío mexicano, fue en realidad un intento directo y planeado para capturar al líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), uno de los principales generadores de violencia en el país. Sin embargo, una filtración desde la Guardia Nacional frustró el operativo.
De acuerdo con la columna Estrictamente Personal, del periodista Raymundo Riva Palacio, una fuente de alto nivel del gobierno federal confirmó que un pitazo desde dentro de la Guardia Nacional alertó a El Mencho de que iban tras él. Esto le permitió cambiar de ubicación y activar a sus fuerzas armadas, que enfrentaron a los elementos federales en una persecución que comenzó en Jalisco y terminó en la capital de Guanajuato. Al menos dos agentes federales murieron, aunque oficialmente se reportaron solo detenciones y decomisos.
La frustración en el gabinete de seguridad es palpable. No solo por el fracaso del operativo, sino porque El Mencho sigue expandiendo su influencia criminal. Según investigaciones de agencias estadounidenses, el CJNG ha aprovechado el debilitamiento del Cártel de Sinaloa y, al apoyar a la facción de Los Chapitos en la guerra de Culiacán, está ganando territorios en el noroeste del país.
El interés de Estados Unidos en esta figura criminal va más allá del tráfico de drogas. Se investiga una red de negocios ilícitos que incluye huachicol, contrabando de tabaco, minería ilegal y exportación fraudulenta de ganado. Esa estructura se habría consolidado durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, y tendría presuntas conexiones con figuras del entorno de Morena como Adán Augusto López, Audomaro Martínez y Ricardo Monreal, aunque ninguno enfrenta cargos en México.

A pesar de padecer una enfermedad, El Mencho mantiene el control del CJNG, que hoy opera en al menos 28 estados. Su captura es una prioridad para Omar García Harfuch, actual secretario de Seguridad, quien fue víctima de un atentado atribuido al CJNG en 2020. Como parte de la nueva estrategia del gobierno de Claudia Sheinbaum, se ordenó capturar a uno de sus principales operadores, Julio César Montero Pinzón, alias El Tarjetas, quien fue abatido en Chiapas en un operativo que no fue revelado públicamente.
La reciente fuga del ciudadano chino Zhi Dong Zhang, colaborador financiero de CJNG y el Cártel de Sinaloa, también bajo custodia de la Guardia Nacional, volvió a exhibir la fragilidad institucional y la infiltración del narco en cuerpos de seguridad. Esto llevó incluso a The Wall Street Journal a advertir que casos como estos podrían poner en riesgo un acuerdo de seguridad y comercio con Estados Unidos.
Claudia Sheinbaum negó las acusaciones del diario, pero el golpe a su gobierno es evidente. La Guardia Nacional, dependiente de la Secretaría de la Defensa, quedó bajo la lupa. Hasta el momento no hay información sobre sanciones a quienes permitieron la fuga de Zhang ni a los responsables de alertar a El Mencho. La situación es vista en Washington como el mayor acto de traición militar que ha enfrentado la presidencia de Sheinbaum.