
Durante tres días, un perro conocido por la comunidad como “El Negro” permaneció inmóvil frente a la cortina metálica de un local clausurado por la Fiscalía General del Estado de Sinaloa, tras un ataque armado ocurrido este fin de semana que acabó con la vida de su dueño —y otra persona más—en el centro de Culiacán.
Presuntamente, el establecimiento estaba habilitado como minicasino clandestino, hecho por el cual civiles armados rafaguearon el lugar. El hombre perdió la vida en el lugar, mientras tanto, el can lo esperó sin moverse, sin comer ni ladrar, fiel y silencioso.
La imagen del animal echado sobre la banqueta, ajeno al ir y venir de los peatones, se volvió viral en redes sociales. Su fidelidad enterneció a ciudadanos y colectivos de defensa animal, que comenzaron a llevarle agua, croquetas y hasta cobijas, con la esperanza de aliviar el duelo mudo de un ser que parecía haber perdido toda motivación para vivir.

De acuerdo con Noroeste, el ataque ocurrió la tarde del viernes 19 de julio en la calle María Morelos, entre Colón y Escobedo. Un grupo de civiles armados disparó directamente contra el inmueble, donde se encontraban varias personas. El saldo fue de dos hombres asesinados —uno de ellos, el dueño del perro— y dos personas más heridas: una mujer y un hombre vestido de payaso.
Las autoridades tuvieron que forzar las rejas del local para ingresar y realizar el levantamiento de los cuerpos, además de asegurar múltiples casquillos percutidos.
Lealtad que resiste el hambre, el miedo y el calor
Según Revista Espejo, el perro permanecía echado, débil y visiblemente triste frente a la cortina del negocio de maquinitas, sin mostrar intención de moverse, comer o responder a estímulos.

Ciudadanos y comerciantes del sector comenzaron a llevarle agua y comida desde el sábado, aunque nada parecía interesarle. Su mirada estaba fija en la puerta, esperando a que su mejor amigo saliera.
“Quizá no entiende que su mejor amigo salió en una bolsa de plástico blanca para no regresar”, escribió la redacción de Espejo al describir la escena.
Vecinos y transeúntes lo bautizaron como el “Hachiko de Culiacán”, en referencia al célebre perro japonés que esperó durante años a su amo fallecido y que inspiró la película “Siempre a tu lado”. En redes sociales circularon imágenes del animal acompañadas de mensajes que pedían ayuda veterinaria o un hogar temporal, aunque muchos coincidían en que el perro simplemente no quería irse.
“El Negro”, según medios locales, es el segundo perro víctima indirecta de la violencia en Culiacán. El primero fue en Colinas de San Miguel, donde un can resultó herido durante el asesinato de su dueño.
Lo rescataron, pero su salud es delicada
Fue hasta el lunes 21 de julio que un grupo anónimo de activistas protectores de animales decidió intervenir. De acuerdo con El Universal y declaraciones de Óscar Sánchez Beltrán, secretario de la Unión de Locatarios del Centro de Culiacán, el rescate se realizó sin complicaciones: el animal no opuso resistencia, aunque tuvo que ser trasladado con bozal y en una canastilla de metal.

“El Negro” presenta síntomas de enfermedades aparentemente graves, por lo que fue llevado a una veterinaria para recibir atención médica. Hasta el momento, no se ha informado si su cuidado quedó en manos de una organización civil, una autoridad o un particular.
Por ahora, se espera que el “Hachiko de Culiacán” logre recuperarse y, eventualmente, encuentre un nuevo hogar. Aunque quizás, como muchos han señalado, su corazón aún no está listo para mudarse.