
Un inquietante recuento de hechos y testimonios públicos y judiciales dibuja una inquietante sombra sobre el gobierno de la Cuarta Transformación. En su columna “Historias de Reportero”, publicada este miércoles y titulada “No haga caso, son rumores”, el periodista Carlos Loret de Mola ofrece una cronología puntual de casos y declaraciones que relacionan a la administración de Andrés Manuel López Obrador con el narcotráfico.
Uno de los señalamientos más relevantes proviene de un testigo protegido de la DEA, quien aseguró que el Cártel de Sinaloa entregó 2 millones de dólares a la campaña presidencial de AMLO en 2006, hecho revelado por ProPublica. A esto se suma el testimonio de Jesús “El Rey” Zambada, quien durante el juicio contra Genaro García Luna afirmó que aportó 7 millones de dólares a la campaña morenista. También Celso Ortega, cabecilla de Los Ardillos, confesó haber entregado recursos de Los Zetas para esa misma contienda electoral.
En el terreno de los hechos públicos, en 2019 el presidente López Obrador ordenó liberar a Ovidio Guzmán, hijo del “Chapo”, después de una captura fallida en Culiacán. En 2020, en una gira por Badiraguato, el mandatario saludó a la madre del capo, el mismo día en que Ovidio cumplía años.
Durante las elecciones de 2021, se reportó la intervención del crimen organizado en favor de Morena en varios estados del Pacífico. Poco después fue asesinado “El Rey del Huachicol”, acusado de financiar campañas morenistas. Además, una fundadora de Morena filtró audios que implican al gobernador Rubén Rocha, quien incluso declaró ante Loret que para gobernar Sinaloa “hay que llegar a acuerdos con los narcos”.

En la escena internacional, las críticas no se han hecho esperar. Donald Trump aseguró que los cárteles controlan México, y su fiscal Pam Bondi declaró en una comparecencia que la pregunta de si México combate al narco debía abordarse “en sesión secreta”. Otros funcionarios republicanos como Marco Rubio, JD Vance, Tom Homan y John Neely Kennedy han señalado directamente a AMLO y ahora a Claudia Sheinbaum de estar bajo influencia o sometimiento de los grupos criminales.
En febrero de 2025, la Casa Blanca emitió un comunicado en el que sostuvo que las organizaciones del narcotráfico tienen una “alianza intolerable” con el gobierno mexicano. El Departamento del Tesoro acusó al jefe de la Oficina de la Presidencia de López Obrador de lavar dinero para el Cártel de Sinaloa.
La situación es tal que Estados Unidos ha presionado al gobierno mexicano para investigar a políticos ligados al narco, reveló Reuters. Entre los casos más recientes destaca el de Julio César Chávez Jr., detenido por presuntos vínculos con el crimen organizado, a pesar de que tenía orden de aprehensión en México desde 2023 y vivía abiertamente entre ambos países.
“El exsecretario de Seguridad de Tabasco es descubierto por el Ejército mexicano con vínculos con el crimen organizado. Era el hombre de confianza del gobernador. Lejos de llamarlo a cuentas, al gobernador lo vuelven secretario de Gobernación, jefe del gabinete de Seguridad, presidenciable, coordinador en el Senado y encima el presidente se refiere a él como ‘mi hermano’“, concluye Loret de Mola.