
El primer actor Eric Del Castillo forma parte de Amanecer, la nueva producción de Juan Osorio que llegará a la pantalla chica el próximo 7 de julio.
En una entrevista con Infobae México dijo estar agradecido con el productor por tomarlo en cuenta, pero también habló sobre los desafíos que ha enfrentado a raíz de la degeneración macular que padece.
Actualmente, el histrión no puede leer y tampoco distingue los rostros, por lo que en algunas ocasiones suele acercarse mucho a las personas para ver con claridad.
“Pero luego piensan que los quiere uno besar... y no, no es eso”, dijo para Infobae México con su característico sentido del humor.

Cabe recordar que fue en noviembre de 2024 cuando el intérprete habló por primera vez sobre las complicaciones visuales con las que vive, pero no lo hacen perder el ánimo ni las ganas de seguir presente en los melodramas.
Durante un evento organizado por la Asociación Nacional de Intérpretes (ANDI), Del Castillo se sinceró sobre su padecimiento al revelar que solo se borra la parte central de su vista.
"Sigue avanzando (el problema visual) pero bendito Dios nunca me voy a quedar ciego, se borra el centro, pero a mis lados veo", explicó.
Degeneración macular: qué es y cuáles son sus síntomas
La degeneración macular es una afección que daña la mácula, una pequeña área ubicada en el centro de la retina, responsable de la visión central y la capacidad de distinguir detalles finos.
Suele desarrollarse en personas mayores, por lo que se la conoce comúnmente como degeneración macular asociada a la edad (DMAE), ya que constituye una de las principales causas de pérdida de visión irreversible en la población adulta.
La mácula permite actividades como leer, conducir, reconocer caras y ver colores con claridad. Cuando la mácula se deteriora, la visión central se ve afectada, lo que limita seriamente las tareas cotidianas que requieren ver con nitidez.

La degeneración macular puede presentarse en dos formas: seca y húmeda. La forma seca representa la mayoría de los casos y se desarrolla por el adelgazamiento gradual de la mácula y la acumulación de depósitos llamados drusas. Su avance suele ser progresivo y lento.
Mientras que la forma húmeda es menos frecuente, pero suele ser más grave, ya que implica el crecimiento anormal de vasos sanguíneos debajo de la retina, lo que puede provocar filtraciones y hemorragias que dañan rápidamente la mácula.
Entre los factores de riesgo se encuentran la edad avanzada, antecedentes familiares, tabaquismo, hipertensión y exposición prolongada a la luz solar sin protección ocular. Sus principales síntomas pueden incluir visión borrosa, distorsión de las líneas rectas y aparición de manchas oscuras en el campo visual central.


