
El zinc es un mineral esencial que el cuerpo necesita para diversas funciones biológicas. Participa en la actividad enzimática, fortalece el sistema inmunológico, favorece la cicatrización de heridas, apoya el crecimiento y desarrollo celular y mejora el sentido del gusto y del olfato. Como el cuerpo humano no produce zinc, es necesario adquirirlo a través de la dieta diaria o suplementos.
¿Qué son las pastillas de zinc y cómo las aprovecha el organismo?
Las pastillas de zinc son suplementos dietéticos diseñados para cubrir deficiencias de este mineral en el cuerpo. El organismo utiliza el zinc para producir proteínas y ADN, combatir infecciones, mantener la salud de la piel, uñas y cabello, y regular la producción de hormonas.
El zinc es fundamental para el buen funcionamiento del sistema inmunológico. Este mineral es esencial para el desarrollo y la activación de ciertos tipos de glóbulos blancos que ayudan a combatir infecciones y enfermedades
Quiénes no deberían tomar pastillas de zinc
- Personas con niveles normales de zinc: No es recomendable un consumo excesivo, ya que puede causar toxicidad por zinc.
- Individuos con enfermedades específicas: Aquellos con condiciones como la enfermedad renal o hepática deben consultar a un médico antes de consumirlo.
- Personas bajo medicación particular: Por ejemplo, ciertos antibióticos y diuréticos puede interactuar negativamente con el zinc.
- Niños: Dosis altas pueden afectar su desarrollo; el consumo debe estar indicado por un pediatra.
Ventajas de tomar pastillas de zinc diariamente:
- Apoyo al sistema inmunológico: Mejora la capacidad del cuerpo para combatir infecciones y enfermedades.
- Cicatrización: Acelera la recuperación de heridas, cortes y úlceras.
- Salud de la piel: Ayuda a controlar afecciones como el acné y favorece la regeneración celular.
- Función cognitiva: Contribuye al buen funcionamiento de la memoria y la atención.

Riesgos de consumir zinc diariamente:
- Toxicidad por zinc: Dosis elevadas pueden provocar náuseas, vómitos, dolor abdominal y diarrea.
- Deficiencia de otros minerales: El exceso puede interferir en la absorción de nutrientes como el cobre y el hierro.
- Supresión del sistema inmunológico: Aunque en pequeñas dosis lo refuerza, un consumo excesivo puede tener el efecto contrario.
- Reacciones alérgicas: En algunos casos, puede causar erupciones cutáneas o problemas respiratorios.
Fuentes naturales de zinc:
- Carne roja y aves.
- Mariscos (especialmente ostras).
- Frutos secos (como almendras y nueces).
- Legumbres (lentejas, garbanzos, frijoles).
- Cereales integrales.
- Semillas (calabaza, chía y girasol).


