
La Diva Indigente se ha consolidado como uno de los personajes más entrañables y populares que han emergido de TikTok en México. Su autenticidad y estilo inconfundible conquistaron rápidamente a miles de seguidores, quienes vieron en ella una figura que rompía con los moldes tradicionales de belleza y comportamiento.
Su primer video viral la mostró bailando cerca del Ángel de la Independencia, acompañada de la frase “¡Pero carísima! Si no, no. De Fábricas de Francia”, que se convirtió en su sello distintivo y la catapultó a la fama en redes sociales.

Con el paso del tiempo, comenzaron a circular numerosos videos donde se le veía cantando, riendo o simplemente siendo ella misma, con una autenticidad que no dejaba indiferente a nadie. Posteriormente se supo que había trabajado como estilista, lo que explicaba su afinidad con lo visual y lo estético.
No obstante, a inicios de mayo surgió una fuerte preocupación entre sus seguidores, ya que se desconocía su paradero. Usuarios, medios de comunicación y creadores de contenido comenzaron a manifestar su inquietud, alimentando rumores sobre lo que había sucedido.
La situación escaló cuando el canal de YouTube, Mafian TV, difundió un video el 6 de mayo asegurando que la influencer había sido internada en un centro de rehabilitación en contra de su voluntad. De acuerdo con ese testimonio, fue engañada con la promesa de asistir a una fiesta y recibir ropa nueva, pero terminó siendo trasladada a una clínica sin su consentimiento, como parte de una estrategia publicitaria.

Estas acusaciones provocaron una oleada de reacciones en redes sociales, donde muchos exigieron explicaciones claras sobre su situación. Esa misma noche, la cuenta oficial de La Diva Indigente en TikTok emitió un comunicado desmintiendo los rumores.
En el mensaje se afirmaba que su ingreso a la clínica fue voluntario y que estaba bajo cuidado médico profesional. Recibe atención especializada en diversas áreas, como salud dermatológica, capilar, psicológica y emocional.
“El objetivo no es generar contenido ni obtener beneficios públicos, sino brindarle un acto de humanidad”, decía el comunicado, acompañado por una fotografía en la que se le veía limpia, serena y notablemente distinta a la imagen por la que muchos la conocieron.
A pesar de esta aclaración, la situación continúa dividiendo opiniones: algunos celebran que finalmente reciba ayuda, mientras que otros siguen cuestionando la versión oficial. No obstante, es una realidad que este cambio puede representar un punto de inflexión sobre su calidad de vida.