
El cabello frágil, quebradizo o con caída excesiva puede ser tratado de forma natural con ingredientes que probablemente ya tienes en tu cocina.
Uno de los remedios caseros más efectivos —respaldado por estudios botánicos y prácticas tradicionales— es el tónico capilar de romero y clavo de olor, ideal para estimular la circulación en el cuero cabelludo y favorecer el crecimiento capilar.
¿Por qué romero y clavo?
El romero ha sido estudiado por su capacidad para mejorar la irrigación sanguínea del cuero cabelludo, lo cual ayuda a que los folículos reciban más oxígeno y nutrientes.

Un estudio publicado en SKINmed Journal comparó el aceite de romero con el minoxidil (fármaco común contra la calvicie), y los resultados mostraron que el romero tuvo efectos comparables tras seis meses de uso.
Por su parte, el clavo de olor es rico en eugenol, un compuesto con propiedades antibacterianas, antioxidantes y estimulantes, que ayuda a fortalecer el folículo y prevenir el quiebre del cabello.

Ingredientes para preparar el tónico
- 1 litro de agua
- 3 ramas de romero fresco (o 2 cucharadas secas)
- 1 cucharada de clavo de olor entero
Opcional: unas gotas de aceite esencial de romero o lavanda para potenciar efectos
Instrucciones
- Hierve el agua y añade el romero y los clavos.
- Cocina a fuego medio durante 10 minutos.
- Retira del fuego, deja enfriar y cuela.
- Vierte en una botella con atomizador.
- Guarda en refrigeración hasta por una semana.

Cómo aplicarlo
- Rocía el tónico en el cuero cabelludo limpio, especialmente en las zonas donde hay caída.
- Masajea suavemente durante 5 minutos.
- No enjuagues. Aplica al menos 3 veces por semana.
Resultados esperados
Con uso constante podrías ir notando menor caída, más brillo, menor caspa y cabello más grueso desde las primeras semanas.
Cabe señalar que esta es una alternativa económica, natural y sin químicos agresivos.