
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) denunció una agresión en contra de su personal de verificación durante un operativo realizado la noche del viernes 3 de abril en una estación de servicio ubicada sobre la carretera federal México-Cuautla, en el municipio de Chalco, Estado de México. El incidente fue documentado en video y difundido por el propio titular de la dependencia, Iván Escalante, a través de redes sociales.
Los hechos ocurrieron cuando inspectores realizaban una revisión volumétrica en una gasolinera localizada en el kilómetro 5+167, en la colonia San Gregorio Cuautzingo. En las imágenes compartidas se observa a trabajadores del establecimiento confrontar a los funcionarios, impedirles el acceso al área de bombas despachadoras y, en algunos momentos, agredirlos verbal y físicamente. Ante la negativa violenta, la verificación no pudo concluirse.
“El que nada debe, nada teme. Aquí está el punto exacto para que los consumidores la ubiquen y no carguen ahí”, advirtió Escalante en su cuenta de X, al tiempo que anunció que Profeco interpondrá las denuncias correspondientes ante las autoridades competentes para que se investigue y sancione este comportamiento.
¿Indicio de irregularidades?
La postura fue respaldada por el director ejecutivo de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), Armando Ocampo Zambrano, quien aseguró que estos actos de obstrucción a la autoridad “no serán tolerados” y que se actuará conforme a lo establecido por la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente.
Ambas dependencias señalaron que la negativa reiterada de una estación de servicio a someterse a inspecciones puede constituir un indicio de irregularidades, como manipulación de bombas o venta de litros incompletos. En casos como este, explicó Ocampo Zambrano, la ley permite incluso la clausura definitiva del establecimiento y la revocación del permiso de operación, en coordinación con la Comisión Reguladora de Energía (CRE), que en el corto plazo se transformará en la Comisión Nacional de Energía (CNE), según ha anunciado el gobierno federal.
Cabe destacar que, desde el pasado 14 de marzo, la Profeco había advertido que endurecería las acciones contra aquellas estaciones que nieguen las visitas de verificación de forma sistemática. Aunque legalmente pueden rechazar una inspección en un primer momento, la negativa reiterada activa procedimientos sancionadores.
Profeco recordó que las inspecciones tienen como objetivo proteger a los consumidores, garantizar la legalidad en la venta de combustibles y asegurar que los litros entregados correspondan con los pagados.
Hasta el pasado 24 de marzo, Escalante aseguró que alrededor de 75% de las estaciones de servicio del país cumplen con el precio estipulado como máximo: 24 pesos por litro de gasolina magna.
“Prácticamente todos los días hemos monitoreado y en diálogo con las empresas. Al corte del viernes 21 de marzo, un 74.4 por ciento de las estaciones de servicio están en cumplimiento con el acuerdo”, refirió entonces desde Palacio Nacional.
Escalante, citando datos de la Comisión Nacional de Energía, explicó el porcentaje de cumplimiento por marca, destacando a Hidrosina, cuyas estaciones de servicio cumplen al 100% con el precio máximo estipulado. Le siguen: G500 (96.6%), Rendichicas (96.6%) y Pemex (86.7%). Estos porcentajes no incluyen a las estaciones de servicio en zonas fronterizas.