
La Ciudad de México ha empezado a dar un paso significativo hacia la protección animal con la aprobación de una iniciativa ciudadana que busca prohibir espectáculos que involucren animales. Sin embargo, las peleas de gallos han quedado fuera del dictamen final.
Según informó el coordinador parlamentario del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en el Congreso local, Jesús Sesma, esta exclusión responde a la necesidad de realizar una consulta pública específica para abordar este tema, algo que no ocurre con otras actividades como las corridas de toros.
De acuerdo con el funcionario, las peleas de gallos requieren un tratamiento distinto debido a su naturaleza y a las disposiciones legales que las rodean. “El tema de gallos tiene una figura diferente a lo que es la tauromaquia, toda vez que en este tema sí requiere de una consulta pública y está totalmente fundamentada. Por esa razón no vendrá el tema de gallos dentro del dictamen”, explicó el legislador en una conferencia de prensa.
Esta decisión ha generado un debate entre los defensores de los derechos de los animales, quienes consideran que todas las formas de espectáculos con animales deberían ser tratadas de manera uniforme.

Un dictamen que modifica la Constitución local y la Ley de Espectáculos Públicos
La iniciativa ciudadana, que originalmente buscaba prohibir todos los espectáculos públicos, privados e itinerantes que involucren animales, incluye actividades como las corridas de toros, novilladas, becerradas, rejoneo y tientas.
Según informó Daniela Álvarez, presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales e Iniciativas Ciudadanas del Congreso local a 24 Horas, el dictamen final mantiene la prohibición de estas prácticas, pero excluye las peleas de gallos. “El rejoneo, las tientas, esos quedan prohibidos, lo único que se saca de este dictamen son los gallos”, detalló Álvarez.
La propuesta también contempla modificaciones a la Constitución local y a la Ley de Espectáculos Públicos, lo que refuerza el compromiso de la Ciudad de México con la protección animal. Sin embargo, la exclusión de las peleas de gallos ha generado críticas por parte de algunos sectores que consideran que esta práctica también debería ser erradicada.

Corridas de toros sin sangre: una alternativa en discusión
En paralelo, los diputados locales presentaron reservas en el dictamen que permitan mantener las corridas de toros bajo un formato sin sangre.
Esta propuesta, impulsada por la jefa de gobierno, Clara Brugada, busca encontrar un punto medio entre la tradición cultural y las demandas de los activistas por los derechos de los animales. Aunque esta alternativa aún está en discusión, representa un intento por preservar ciertos aspectos de la tauromaquia mientras se eliminan los elementos más controvertidos.
La exclusión de las peleas de gallos del dictamen ha generado reacciones mixtas entre los defensores de los derechos de los animales. Mientras que algunos celebran los avances logrados en la prohibición de otras prácticas, otros consideran que la decisión de no incluir las peleas de gallos representa un retroceso en la lucha por la protección animal.