
Con la llegada de la temporada de calor, los desmayos son un riesgo creciente para muchas personas, especialmente en áreas con temperaturas extremadamente altas. Este tipo de clima puede afectar seriamente la salud, provocando condiciones peligrosas como la deshidratación y el golpe de calor, que son las principales causas de los desalientos en épocas calurosas.
Los desmayos en tiempos de calor son comúnmente el resultado de un conjunto de factores fisiológicos que se agravan con las altas temperaturas. La calidez extrema aumenta el temple corporal, lo que hace que el cuerpo se esfuerce más para regular su temperatura interna, a través de la sudoración y la dilatación de los vasos sanguíneos.
Cuando este proceso no se maneja adecuadamente, puede originar problemas como:
Deshidratación
En épocas de calor, el ser humano pierde una gran cantidad de líquidos debido al sudor, lo que puede ocasionar deshidratación, hecho que reduce el volumen de sangre en el cuerpo y a su vez, disminuye la cantidad de oxígeno que llega al cerebro y puede llevar a un desmayo.
Golpe de calor
Cuando el cuerpo no puede enfriarse adecuadamente y la temperatura corporal se eleva a niveles peligrosos (por encima de los 40°C), se produce un golpe de calor. Esta condición afecta el sistema nervioso y puede causar confusión, mareos, pérdida de conciencia y desvanecimientos.
Falta de alimentos o de sal
En algunos casos, las personas no ingieren suficiente comida o sales esenciales, lo que puede contribuir a la fatiga y los mareos bajo el calor. Las sales y los electrolitos son fundamentales para mantener el equilibrio de fluidos en el cuerpo y evitar desmayos.

Cómo evitar los desmayos durante el calor extremo
La prevención de los desmayos durante las olas de calor es crucial para proteger la salud. El primer paso para prevenirlo, es asegurarte de beber suficiente agua durante el día. Evita las bebidas alcohólicas o con cafeína, ya que pueden contribuir a la deshidratación.
De igual maneara, siempre que sea posible, busca sombra o permanece en lugares frescos durante las horas de mayor calor. Si debes estar al aire libre, usa un sombrero, gafas de sol y protector solar para protegerte de los efectos directos del sol.

Si comienzas a sentirte mareado o agotado, busca un lugar fresco y respira profundamente. Coloca tus pies en alto y bebe agua lentamente. Si los síntomas persisten, busca atención médica inmediatamente.

