La bugambilia, conocida científicamente como Bougainvillea spectabilis, es una planta originaria de Sudamérica, especialmente de Brasil y Perú, que ha sido ampliamente reconocida tanto por su valor ornamental como por sus aplicaciones en la medicina tradicional.
En regiones como México, es común encontrarla como parte de paisajes decorativos pero también ha sido utilizada durante generaciones en la elaboración de remedios caseros, principalmente para tratar afecciones respiratorias como la tos.
Además, sus flores se han empleado en diversas preparaciones, entre las que destaca una receta innovadora y llena de beneficios: el refresco de bugambilia. Este preparado, de fácil elaboración casera, combina flores de bugambilia con ingredientes naturales que no sólo destacan por su sabor, sino también por las propiedades que aportan.
Es importante destacar que el consumo de esta receta debe ser moderado y con precaución, especialmente en personas embarazadas, lactantes, o quienes padecen hipertensión, por lo que se recomienda consultar a un médico antes de incluirla en la dieta diaria.
Receta de refresco de bugambilia
La receta resalta también la versatilidad de la bugambilia como ingrediente que trasciende lo ornamental para formar parte de la gastronomía, ya que su decocción permite extraer las propiedades bioactivas de las flores, las cuales han sido documentadas en investigaciones y en la tradición popular por sus beneficios.
Una vez preparada, la bebida se distingue por sus burbujas naturales, su color vibrante, durabilidad y por ser una alternativa saludable dentro de las tendencias actuales de consumo consciente y natural.
Ingredientes
- Un litro de agua
- ¼ de taza de azúcar orgánica (la cual, alimentará a los probióticos del fermento de jengibre y dará lugar a las burbujas, por lo que al final, la bebida es prácticamente sin este endulzante
- De 10 a 15 flores de bugambilia previamente desinfectadas
- ⅓ de taza de fermento de jengibre (este es para generar las burbujas y en caso de no quererlo, puede omitirse)
- Jugo de 2 limones
Instrucciones
- Vacía en una cazuela el agua junto con las flores de bugambilia y el azúcar
- Mezcla a fuego bajo hasta que se disuelva el azúcar
- Mantén la flama baja durante un lapso de aproximadamente 10 minutos para extraer las propiedades y el color de las bugambilias
- Una vez transcurrido el tiempo, cuela y deja enfriar a temperatura ambiente
- Posteriormente deberás vaciar en una botella de vidrio el fermento, el jugo de limón y la mezcla de bugambilia
- De ser posible, cierra herméticamente y deja reposar en un lugar tibio y oscuro por uno o dos días (dependiendo de la temperatura de la zona geográfica será el tiempo que puede tardar, ya que a mayor calor, más rápido va a carbonatar)
- Una vez listo, se puede guardar en el refrigerador y llega a durar hasta 10 días
Como sugerencia, la creadora de contenido mencionó en su publicación que en caso de tener alguna condición de salud o si nunca se han consumido fermentos, se consulte a un médico antes para que señale si puede consumir o no esta bebida.
Todo lo que necesitas saber de la bugambilia
De acuerdo con información publicada por la Universidad de Texas en El Paso (UTEP), la bugambilia, conocida científicamente como Bougainvillea spectabilis, es una planta ampliamente reconocida por su valor ornamental y sus aplicaciones en la medicina tradicional.
Es originaria de Sudamérica, específicamente de países como Brasil y Perú, aunque esta especie ha sido cultivada en diversas regiones subtropicales y tropicales del mundo, como México, debido a su atractivo visual y versatilidad.
La bugambilia pertenece a la familia botánica Nyctaginaceae y es conocida por una variedad de nombres comunes, como buganvilla, Napoleón, veranera, trinitaria, Santa Rita y papelillo, entre otros.
Según la universidad, en inglés se le conoce como “paper flower”, debido a la textura de sus brácteas, que asemejan papel. Según detalló la UTEP, esta planta es nativa de Sudamérica y cuenta con una presencia destacada en Brasil y Perú, aunque su cultivo se ha extendido a otras regiones del mundo con climas cálidos, donde se utiliza principalmente como planta ornamental.
Sin embargo, la UTEP informó que las flores de la bugambilia son la parte más comúnmente utilizada de la planta. Estas flores frescas se emplean para preparar infusiones mediante un proceso de decocción, es decir, se hierven en agua caliente para extraer sus propiedades. Este método de preparación ha sido utilizado durante generaciones, especialmente en la medicina tradicional mexicana.
Uno de los usos más destacados de la bugambilia en la medicina tradicional es el tratamiento de problemas respiratorios. Según la UTEP, las infusiones elaboradas con sus flores se han empleado históricamente para aliviar la tos y otras afecciones relacionadas con el sistema respiratorio.
Este conocimiento popular ha sido transmitido de generación en generación, consolidando a la planta como un recurso natural en el ámbito de la salud tradicional. Además, otra especie relacionada, la Bougainvillea glabra, ha demostrado tener propiedades como insecticida botánico, lo que amplía el rango de aplicaciones prácticas de este género de plantas.
A pesar de sus beneficios, la UTEP advierte sobre varios riesgos asociados al uso de la bugambilia. En primer lugar, no se ha establecido la seguridad de los productos derivados de esta planta durante el embarazo y la lactancia, lo que sugiere que su consumo en estas etapas debe evitarse.
Por otro lado, el contacto directo con el jugo del tallo puede provocar dermatitis severa, una reacción inflamatoria de la piel que puede resultar dolorosa. Asimismo, las espinas presentes en las ramas de la planta representan un riesgo físico, ya que pueden causar heridas al manipularla sin precaución.
La UTEP igualmente enfatizó en la importancia de consultar a un profesional de la salud antes de utilizar cualquier planta medicinal o suplemento herbario. La automedicación y el autodiagnóstico pueden tener consecuencias negativas, por lo que se recomienda actuar con prudencia y buscar orientación médica adecuada.
