Con su forma exótica y su presencia elegante, en muchas culturas asiáticas, las orquídeas simbolizan amor, belleza y refinamiento, además, son percibidas como representaciones de la perfección y pureza, mientras que, en la sociedad occidental, son regalos recurrentes en eventos o festividades significativas como bodas y aniversarios, ya que poseen un profundo significado que no solo varía según la cultura, sino por su color y especie.
El significado de las orquídeas se enmarca dentro del lenguaje de las flores, conocido como floriografía, un sistema simbólico que permite transmitir mensajes y emociones a través de las plantas, el cual, alcanzó su auge en la época victoriana, cuando se utilizaba como una forma de transmitir sentimientos complejos y profundos dependiendo de los factores ya mencionados.
Además de ser muy apreciadas como plantas ornamentales, las orquídeas tienen una gran importancia cultural y económica en diversas partes del mundo gracias a su amplia popularidad. De acuerdo con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente de México (Profepa), las orquídeas constituyen uno de los grupos de plantas más diversos del mundo, con aproximadamente entre 20 mil y 30 mil especies.
Por su diversidad, estas plantas se clasifican en distintas subfamilias y géneros, cada una con características únicas, por ejemplo, según la florería AZAP, las orquídeas Oncidium, conocidas como “orquídeas bañeras”, destacan por sus racimos de pequeñas flores vibrantes, mientras que las orquídeas Phalaenopsis, denominadas “orquídea mariposa”, son valoradas por sus grandes y elegantes flores que pueden permanecer en floración durante semanas.
Cuál es el significado de regalar orquídeas
Según Interflora, una reconocida marca internacional de floristerías, cada color de las orquídeas tiene un significado especial, por ejemplo:
Orquídeas blancas: El color blanco, común en las orquídeas, simboliza pureza, elegancia, delicadeza, sinceridad y sofisticación. Son un regalo ideal para bodas o para expresar un amor puro e incondicional.
Orquídeas moradas: este color representa admiración, prudencia y sabiduría, por lo que regalar una orquídea morada es perfecto para demostrar respeto y aprecio hacia alguien especial.
Orquídeas amarillas: transmite alegría, por lo que regalar estas orquídeas es ideal para celebrar ocasiones felices, como la llegada de un recién nacido. Sin embargo, este color también se asocia con el erotismo, así que debe considerarse bien al elegir al destinatario.
Orquídeas rosas: asociado a pureza y delicadeza, expresa amor, ya sea para una pareja, una madre o un familiar, por ello es uno de los colores más versátiles y cargado de sentimientos sinceros.
Orquídeas rojas: aunque no es muy habitual en las orquídeas, simboliza pasión y deseo, por lo que las flores de este color son ideales para un regalo romántico, como en San Valentín o un aniversario.
Orquídeas azules: este color transmite paz, aprecio y armonía, así que, aunque son difíciles de encontrar, las orquídeas azules son una buena opción para compañeros de trabajo, dado que el azul se asocia con los negocios, pero de acuerdo con el lenguaje de las flores, también son útiles para buscar una reconciliación.
Orquídeas verdes: como se trata de una de las variedades más raras y exclusivas, el color verde simboliza buena suerte, naturaleza, espontaneidad, libertad y esperanza, por lo que será un obsequio único y memorable.
¿Por qué son populares las orquídeas en México?
Las orquídeas son populares en México debido a su larga y emblemática historia en el territorio. Según la Profepa, en México se han registrado alrededor de mil 260 especies distribuidas en 170 géneros, con cerca del 40% consideradas endémicas; por su parte, un estudio publicado en la revista Polibotánica del Instituto Politécnico Nacional detalla que las orquídeas han sido altamente valoradas desde tiempos precolombinos por su importancia cultural, económica y social, siendo utilizadas como recurso médico, ceremonial, alimenticio y como fuente de ingresos.
En la época prehispánica, los géneros Laelia, Prosthechea y Bletia se emplearon principalmente para la obtención de un pegamento llamado tzauhtli o tzacutli, producido a partir de mucílagos extraídos de sus pseudobulbos, usados en el arte plumario y como fijador de pigmentos, además, según las documentaciones históricas citadas en la publicación universitaria, se utilizaban con fines medicinales para tratar afecciones como disentería, tos, mala digestión, heridas infectadas, fiebre y dolor de cabeza. Asimismo, las flores de especies como Prosthechea citrina y Laelia autumnalis han sido elementos decorativos en coronas y guirnaldas utilizadas en festividades religiosas, como, por ejemplo, las peregrinaciones al santuario de Chalma, Estado de México.
Sin embargo, la sobreexplotación de las orquídeas ha generado problemas como la disminución de su población en su hábitat natural, agravada por el cambio climático, la deforestación, el comercio ilegal y la falta de participación comunitaria en actividades de conservación. De acuerdo con los datos del estudio, se estima que desde 1998 han desaparecido más de 20 especies en México, pues debido a su naturaleza epífita y endemismo, son especialmente vulnerables a la extinción.
Por otro lado, en el ámbito doméstico, el cultivo de orquídeas se ha popularizado gracias a su adaptación a diversos entornos, particularmente en interiores como un elemento decorativo, por ejemplo, en el Feng Shui se considera que mejoran el ánimo y atraen energía positiva a un espacio. No obstante, estas flores requieren cuidados específicos, como un ambiente cálido y húmedo, luz indirecta, buena circulación de aire, riego moderado y fertilización apropiada durante el crecimiento activo, para garantizar su salud y floración prolongada.
