En días recientes, la Administración de Control de Drogas (DEA) aseguró a un hombre que figuraba entre los objetivos de alta relevancia para el gobierno estadounidense.
Se trata de Efraín Sánchez Cabanillas, mejor conocido como ‘Bala’, presunto integrante del Cártel de Sinaloa a quien se le imputan cargos por traficar distintas drogas.
El operativo que permitió su captura ocurrió en el Aeropuerto Internacional de Punta Cana, en la provincia La Altagracia de República Dominicana. El narcotraficante de 38 años buscaba salir del país en un vuelo comercial.
Las investigaciones encabezadas por agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y el Ministerio Público del país caribeño, en colaboración con oficiales de la DEA y el Servicio de Alguaciles de Estados Unidos (US Marshals), permitieron ubicar al ciudadano mexicano en la terminal aérea.
Los uniformados aprehendieron a ‘Bala’ en atención a lo establecido por las leyes migratorias locales, las cuales establecen que “no serán admitidos en territorio dominicano extranjeros con antecedentes penales o prófugos de la justicia”.
En una conferencia de prensa posterior, el presidente de República Dominicana, Luis Abinader, confirmó que Sánchez Cabanillas no tenía residencia en dicho territorio, sino que estaba de paso.
A través de un comunicado, la Dirección Nacional de Control de Drogas reveló que ‘Bala’ es requerido por un tribunal del Distrito Judicial de Massachusetts, en donde está alojada una acusación en su contra por conspiración para distribuir y poseer, 400 gramos o más de fentanilo, cinco kilogramos de cocaína y 500 gramos o más de metanfetaminas.
En el momento de su arresto, ‘Bala’ portaba un chaleco —presuntamente con protección antibalas— y un casco. Después de su detención en el Caribe, Sánchez Cabanillas fue entregado a las autoridades norteamericanas para enfrentar el proceso correspondiente.
Pistas del CDS en aseguramiento histórico de cocaína
El 6 de diciembre de 2024, la DNCD, agentes militares y oficiales de la Dirección de Aduanas incautaron en el Puerto Multimodal Caucedo, ubicado en el municipio de Boca Chica, un cargamento de nueve toneladas y media de cocaína que llegó por vía marítima desde Colombia.
Según las investigaciones, la red criminal detrás de este histórico aseguramiento logró captar a varios empleados de la terminal para que permitieran la entrada de la droga a bordo de un contenedor.
Una vez en Puerto Caucedo, los implicados trataron de esconder la droga en un cargamento de plátanos que provenía de Guatemala y se dirigía a Bélgica. En este movimiento, elementos del Ministerio Público y la DNCD descubrieron la operación.
Aunque las autoridades no revelaron cuál sería la organización delictiva responsable de este contenedor, al inspeccionar los paquetes fue posible apreciar que la mayoría estaban rotulados con etiquetas. Algunas de las marcas presumían el número 701, impreso sobre una imagen de la bandera de México.
Cabe señalar que ‘701′ es uno de los múltiples apodos con los que es conocido Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, cofundador del Cártel de Sinaloa que actualmente enfrenta una cadena perpetua en EEUU.
