
El Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo, enfrenta su peor crisis interna. La guerra entre las facciones de La Mayiza, de Ismael Zambada Sicairos, alias “El Mayito Flaco”, y Los Chapitos, comandada por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, ha sumido a Sinaloa en más de 170 días de violencia ininterrumpida.
Según el periodista especializado en temas de seguridad, Óscar Balderas, la situación ha llevado a la organización al borde del colapso: “Estamos viendo en tiempo real el funeral del Cártel de Sinaloa”, afirmó en entrevista con Adela Micha.
Explicó que los recientes golpes a los principales operadores de la facción de Los Chapitos, como José Ángel Canobbio Inzunza, alias “El Güerito”,Kevin Alonso Gil Acosta, alias “El 200″, y Mauro Alejando Núñez Ojeda, “El Jando”, han dejado a Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar debilitados, lo que podría acelerar su captura en los próximos días, incluso antes de que acabe el mes.
El experto señaló que con estas capturas, el gobierno de Claudia Sheinbaum parece haber cambiado la estrategia de combate al crimen organizado y ahora se enfoca no sólo en los líderes visibles, sino también en operadores clave que sostienen la estructura delictiva.
“Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán están más desprotegidos que nunca. El gobierno les ha quitado sus alfiles y está cada vez más cerca de capturarlos”, aseveró.

La combinación de una guerra interna, el debilitamiento de Los Chapitos y la incertidumbre sobre el futuro de “El Mayo” Zambada, quien busca asistencia consultar para ser repatriado a México, ha llevado a muchos expertos a cuestionar el destino del Cártel de Sinaloa.
“Si hay un momento en la historia en el que los líderes del Cártel de Sinaloa podrían caer, es ahora: febrero de 2025″, subrayó Balderas.
Las capturas recientes han desmoronado la estructura criminal del cártel, y las autoridades parecen estar cada vez más cerca de los hermanos Guzmán Salazar. Al citar a sus fuentes dentro del gobierno, Balderas precisó que ya también se ha hecho análisis de quiénes serían los sucesores de Los Chapitos.
“Quienes quedarían, esto no me dijeron quiénes, pero tienen ya por lo visto ubicados quiénes podrían ser los sucesores, estarían ya en el ánimo de pactar una especie de tregua debido a que el desgaste económico para las dos facciones ha sido altísimo”, contó.
Balderas explicó que el costo financiero y social de la guerra entre Los Chapitos y Los Mayos ha sido tan elevado que las personas que tomen el control del cártel podrían optar por buscar una negociación para frenar la violencia y poder seguir con sus negocios.
Una guerra interna sin ganadores

Desde la captura y extradición de “El Mayo” Zambada el 25 de julio de 2024, la estructura del Cártel de Sinaloa se ha fragmentado en una lucha por el control del territorio y las rutas del narcotráfico. De un lado está la familia Zambada y sus aliados, y del otro, Los Chapitos y sus brazos armados.
Según el comunicador, la guerra entre estas facciones ha generado una crisis sin precedentes en la organización criminal, pero señaló que más allá de ganadores, sólo hay perdedores.
“En una guerra que ya lleva 170 días todos perdieron. Perdieron La Mayiza, perdieron La Chapiza, perdió sin duda la gente de Sinaloa, los empresarios, los padres de familia, el gobernador”, apuntó.
El periodista detalló que la violencia, que antes se concentraba en zonas rurales, ahora ha alcanzado centros urbanos en Sinaloa, afectando la vida cotidiana de la población.
“Hoy todavía hay niños que no están yendo a la escuela en Sinaloa, padres que están en el confinamiento tipo pandemia con sus hijos porque la violencia está brutal en Sinaloa y la cosa no para”, finalizó.