Esta es la polémica razón por la que Adrián Marcelo detestó el show de Kendrick Lamar en el Super Bowl

Adrián Marcelo difícilmente desaprovecha la oportunidad de subirse a una tendencia para generar polémica y perpetuar su vigencia en redes sociales. El youtuber dividió comentarios al repudiar el show de Kendrick Lamar en el medio tiempo del Super Bowl LIX, al que definió como demasiado pretensioso.

A la audiencia le llevó un día descubrir todos los guiños que el rapero integró en su presentación, la cual ha sido definida como un acto político. Javier Ibarreche, por ejemplo, se volvió tema de conversación por puntualizar en los conceptos más relevantes de la presentación.

En contraparte, Adrián Marcelo se sumó a las voces críticas. Para el regiomontano, el medio tiempo del Super Bowl es un espacio para entretener y no para aleccionar: “El medio tiempo del Superbowl es más importante que cualquier causa social. A quienes lo ven esperando que el artista utilice el espacio para abogar por su agenda, déjenos en paz. Habemos enajenados que lo único que queremos es ser felices y no necesitamos mucho. Sí, así de egoístas somos. Déjenos en paz”, escribió en X.

Su opinión, como suele ocurrir, abrió una tensa conversación en la que hubo dos bandos claramente divididos. En medio de la conversación, una pregunta se volvió recurrente: ¿por qué ha sido tan polémico el show de Kendrick Lamar?

Kendrick Lamar ofreció un espectáculo lleno de simbolismo y mensajes contundentes durante el show de medio tiempo del Super Bowl, celebrado en el Caesars Superdome de Nueva Orleans.

El rapero de 37 años abordó temas de identidad y controversia con una puesta en escena impactante. En un momento clave, expresó: “La revolución está a punto de ser televisada”, pero de inmediato matizó: “Escogieron el momento adecuado, pero al tipo equivocado”. Con esta declaración, dejó en claro que no pretende ser un líder político o un símbolo de lucha social, imagen que se le ha atribuido en varias ocasiones.

El diseño del escenario, a cargo del propio Lamar, simuló un mando de PlayStation, transmitiendo la idea de que su vida es como un videojuego. Samuel L. Jackson también tuvo un papel destacado al aparecer vestido como el personaje de Tío Sam, reforzando la narrativa del “gran juego estadounidense”. Además, al inicio del espectáculo, varios bailarines salieron de un Buick GNX, modelo emblemático en la carrera de Lamar por figurar en la portada de su álbum más reciente. Para lograr el efecto, la producción tuvo que modificar un vehículo similar, ya que el original tenía problemas legales debido a su dueño fallecido.

Entre el público se encontraba el presidente Donald Trump, cuya presencia añadió otra dimensión a la actuación de Lamar. Sin mencionarlo directamente, el artista incorporó elementos visuales con carga política. Sus bailarines, vestidos con atuendos en rojo, blanco y azul, evocaron la presencia de pandillas como Crips y Bloods, pero al final formaron una bandera estadounidense y levantaron el puño en lo que parecía un saludo de poder negro.

Un momento inesperado ocurrió cuando un miembro del elenco desplegó una bandera en apoyo a Gaza y Sudán, antes de ser retirado del escenario. La NFL aclaró en un comunicado: “Ninguna persona involucrada en la producción tenía conocimiento de la intención de este individuo”.

Lamar también incluyó un guiño a su disputa con Drake, conflicto que ha dominado la escena del hip-hop en los últimos meses. Antes de interpretar su tema “Not Like Us”, con el que recientemente ganó el premio a Grabación del Año en los Grammy 2025, dijo: “Quiero tocar su canción favorita, pero ya saben cuánto les gusta demandar”. La interpretación terminó con Lamar avanzando desafiante por el escenario, pronunciando el nombre de Drake con una sonrisa.

El momento culminante llegó cuando Serena Williams, exnovia del rapero canadiense, apareció en escena vestida con un atuendo de tenis en azul y blanco, desatando una fuerte reacción del público.

Además de la música y la controversia, el atuendo de Kendrick Lamar también captó la atención. Lució vaqueros de campana de la firma Celine y una chaqueta personalizada de Martine Rose con la palabra “Gloria” en el pecho, en referencia a su canción del álbum GNX, en la que colabora con SZA.

El espectáculo de Lamar en el Super Bowl 2025 dejó huella con una combinación de mensaje social, simbolismo visual y referencias personales que generaron impacto en la audiencia.