El chilacayote, también conocido como “chilaca”, es un fruto que pertenece a la familia de las cucurbitáceas, la misma que incluye a las calabazas, pepinos y melones. Este fruto, que crece en plantas trepadoras y rastreras, tiene una forma y tamaño diferente a la calabaza, aunque comparte algunas características con ella. Su sabor es único, y su uso en la cocina mexicana es tan diverso como nutritivo.
Beneficios del chilacayote para la salud
El chilacayote es un excelente aliado para la salud debido a sus numerosos beneficios. Este fruto es una fuente rica en vitaminas A y C , así como hierro, las cuales son esenciales para fortalecer el sistema inmunológico, mejorar la visión y promover la salud de la piel.
Además, las semillas del chilacayote contienen grasas saludables y proteínas, lo que lo convierte en un ingrediente completo desde el punto de vista nutricional.
Con solo 19 kilocalorías por cada 150 gramos de chilacayote, es un alimento bajo en calorías, lo que lo hace ideal para quienes buscan mantener o reducir su peso. Su contenido, alto en fibra, también es significativo, lo que favorece la digestión y la regularidad intestinal.
Además, el chilacayote tiene propiedades antioxidantes que ayudan a combatir los efectos de los radicales libres, lo que contribuye a prevenir el envejecimiento prematuro y algunas enfermedades crónicas.
Uno de los beneficios más destacados del chilacayote es su capacidad para regular los niveles de azúcar en la sangre, gracias a sus beneficios hipoglucémicos. Por ello, se recomienda su consumo en personas con diabetes, siempre bajo la supervisión de un médico. Esta propiedad ayuda a la liberación de insulina a través del páncreas, lo que contribuye al control de la glucosa en el organismo.
Usos culinarios del chilacayote
El chilacayote es muy versátil en la gastronomía mexicana. Desde sus flores, que se utilizan para hacer dulces tradicionales, hasta sus semillas, que se pueden tostar y comer como snack o preparadas en de moles y otros platillos típicos.
Cuando el chilacayote está tierno, se emplea en caldos como los de pollo o res, o en guisados con carne de cerdo. Una vez maduro, se utiliza para elaborar dulces cristalizados o en almíbar, una delicia que resalta su sabor suave.
Este fruto se puede preparar de diversas maneras, como en rebanadas al estilo mexicano, en sopas tradicionales como la sopa mixteca, o simplemente asado. Sin duda, es un ingrediente que ofrece muchas posibilidades en la cocina, al mismo tiempo que brinda grandes beneficios nutricionales y medicinales.