
En una de las declaraciones de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera, afirmó que el entonces gobernador de Baja California, Ernesto Ruffo Appel les brindaba protección a los Arellano Félix, al afirmar que la familia de delincuentes tenía una buena relación con el político.
Ruffo Appel era el primer candidato panista en la historia de México en conquistar una gubernatura y cuando estas declaraciones surgieron, apenas contaba con cuatro años en el cargo, por lo que él también reaccionó al deslindarse de toda acusación.
“En la primera confesión hecha ante el general Guillermo Álvarez Nara, ‘El Chapo’ Guzmán afirmó que el gobernador Baja California les brindaba protección a los hermanos Arellano, Félix, el funcionario en cuestión era Ernesto Ruffo Appel, el primer candidato panista en la historia de México en conquistar una gubernatura estatal, Ruffo Appel tenía por lo menos cuatro años de gobernar Baja California, cuando Guzmán Loera declaró ante el Ministerio Público”, se lee en el libro ‘Los Señores del Narco’.
Guzmán Loera en todo momento dio detalles de cómo era la relación entre su rival y el titular del Ejecutivo Estatal de Baja California, al afirmar que incluso el mismo Benjamín cuando era su amigo le comentó sobre los negocios que tenía con el hermano, a quien al principio lo mencionaron como Roberto y después fue conocido como Claudio.

“A diferencia de sus otras confesiones, ‘El Chapo’ Guzmán no solo se mantuvo en esta confesión, sino que fue prolífico en los detalles, ‘sé que el hermano del gobernador de Baja California Norte, que al parecer se llama Roberto Ruffo Appel, sí es socio de una constructora propiedad de los hermanos Arellano Félix y me consta porque así me lo dijo hace año y medio, a mediados de 1991, Benjamín Arellano Félix afirmó Guzmán Loera refiriéndose a la época que tenía una muy buena relación con ellos, inclusive estaban construyendo muchas casas en Guadalajara”, se lee en la obra de la escritora.
Además, el exlíder del Cártel de Sinaloa, agregó que el hermano del Gobernador figuraba como socio en unas farmacias que eran de los Arellano Félix, quienes incluso tenían credenciales de la Policía Judicial de Baja California, pues presuntamente también el procurador estaba implicado.
“Guzmán Loera afirmó que el hermano del gobernador también figuraba como socio en unas farmacias que los Arellano Félix tenían en Tijuana, hace año y medio, ‘cuando Benjamín y yo teníamos buena amistad’, ‘me dijo que él tenía una amistad con el gobernador Ruffo Appel, inclusive Benjamín me ofreció que si quería algunas credenciales de la Policía Judicial de Baja California, las podía conseguir con el procurador, ya que también con él tenía una buena amistad’”, narra la autora del libro.

El procurador también fue señalado por ‘El Chapo’
Juan Francisco Franco Ríos, el entonces procurador general de justicia de Baja California, también fue señalado de tener estrechos vínculos con los fundadores del Cártel de Tijuana, según declaraciones de Guzmán Loera tras ser detenido en 1993.
“‘Benjamín continuó, me mostró una credencial de la Judicial Estatal en la que aparece con el cargo de comandante, y me mostró un oficio de comisión dirigido al director de la Policía Judicial del Estado de Sinaloa, Benjamín me dijo que llevó ese documento para que se lo sellaran y aparecía el sello de la Policía Judicial Estatal. En efecto, Ernesto Ruffo Appel sí tenía un hermano, pero no de nombre Roberto, sino Claudio, con quien públicamente no tenía una buena relación, eran más estrechos sus vínculos con Juan Francisco Franco Ríos, procurador general de justicia de Baja California”, se lee en la obra.


