Pensaron que su gata había fallecido… hasta que siete años después recibieron una llamada que lo cambió todo

Un malentendido y un microchip defectuoso formaron parte de una increíble cadena de hechos que culminó en un reencuentro lleno de emoción

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La historia de esta gatita
La historia de esta gatita fue compartida en Tik Tok, donde se viralizó rápidamente (TT/ @slowlydecomposingcorpse)

Durante siete años, una familia creyó haber perdido para siempre a su querida gata Mittens. Después de una mudanza complicada, la felina desapareció sin dejar rastro, y aunque la buscaron incansablemente, nunca pudieron encontrarla.

Después de varios días un veterinario les informó que habían encontrado a un gato con características similares pero con un microchip defectuoso. Sin embargo, el animal padecía una enfermedad terminal y debía ser sacrificado.

Convencidos de que se trataba de su mascota, tomaron la difícil decisión de despedirse. Sin embargo, a principios de este año, un giro inesperado los dejó sin palabras.

La historia de Mittens

La familia continúa compartiendo actualizaciones sobre el estado de Mittens (TT/@slowlydecomposingcorpse)

El pasado 8 de enero, la familia compartió en TikTok el emotivo momento en que se reencontraron con Mittens, su gata, a quien habían dado por muerta desde 2017. “Esto es realmente lo más surrealista que me ha pasado jamás. Ahora tiene entre 12 y 13 años. La pobre está tan aterrorizada”, se lee en la descripción del video.

Mittens fue rescatada en 2011 de un destino incierto. En aquel entonces, la gata, inicialmente llamada Gizmo al creer que era macho, mostraba un comportamiento agresivo que dificultaba su adopción.

Durante su primera noche con la familia, llegó a morder a la madre, pero con el tiempo logró adaptarse y establecer un vínculo con sus nuevos dueños. Aunque prefería pasar tiempo al aire libre, esto no representaba un problema, ya que vivían en un suburbio tranquilo con poca fauna nativa.

Sin embargo, en 2017, la vida de la familia y de Mittens cambió drásticamente. Tras ser desalojados de su hogar, tuvieron que mudarse a otro lugar, un proceso que resultó traumático para la gata.

“Mittens no lo tomó bien, las mudanzas la asustaron y finalmente salió corriendo. Mi mamá pasó meses buscándola, pero no pudo encontrarla”, menciona el video. A pesar de los esfuerzos de la familia por hallarla, la gata desapareció sin dejar rastro.

Meses después, una llamada del veterinario parecía cerrar definitivamente el capítulo de su desaparición. Un gato con características similares había sido encontrado, pero el microchip presentaba fallas que impedían confirmar su identidad.

Además, el veterinario informó que el animal padecía cáncer de páncreas y debía ser sometido a eutanasia. Con el corazón roto, la familia dio su consentimiento, convencidos de que se trataba de su querida mascota.

Un reencuentro inesperado

Ahora Mittens recuperó la confianza
Ahora Mittens recuperó la confianza en su antigua familia y disfruta ser cuidada y consentida (TT/ @slowlydecomposingcorpse)

Lo que parecía el final de la historia dio un giro inesperado a principios de este año. Según el video de TikTok, el mismo veterinario que había atendido a Mittens en el pasado contactó nuevamente a la familia para informarles que un gato había sido entregado en su antigua ubicación.

Al acudir al lugar, descubrieron, incrédulos, que se trataba de Mittens, viva y en condiciones relativamente buenas, aunque algo delgada y sucia. Durante siete años habían creído que la gata había fallecido.

La dueña compartió en los comentarios del video que no tienen idea de dónde estuvo Mittens todo este tiempo, aunque sospechan que pudo haber vivido en el patio trasero de alguien, ya que su estado de salud no estaba deteriorado.

“Alguien la encontró y la llevó al veterinario del lugar donde solíamos vivir, y él nos encontró al ver el microchip. Es increíble que en siete años nadie intentara revisarlo”, escribió la dueña respondiendo a un seguidor que le preguntó cómo la habían encontrado.

Aunque al principio Mittens no reconoció a su familia, ya que estaba confundida y asustada, con el paso de los días comenzó a mostrar señales de familiaridad. La dueña también compartió imágenes de 2011, cuando Mittens llegó a su hogar, y bromeó sobre cómo el tiempo la había cambiado: “Es mucho más amigable ahora que no tiene dientes”.

Para facilitar su readaptación, la familia le proporcionó una caja donde pudiera dormir en un lugar tranquilo y apartado de la casa. Sin embargo, Mittens no tardó en recuperar la confianza y hoy en día duerme con su dueña en la cama. Además, han programado una cita con el veterinario para asegurarse de que su salud sea óptima tras tantos años de incertidumbre.

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