Epiphany, la madre perruna que sobrevivió a cuatro disparos y cuida a sus 11 cachorros

Con cuatro disparos en el cuerpo y una determinación inquebrantable, Epiphany luchó por sobrevivir para cuidar a sus 11 cachorros.

Esta madre perruna, encontrada gravemente herida en Memphis, se ha convertido en un símbolo de fortaleza al proteger a sus crías incluso en medio del dolor y la adversidad.

A pesar de las heridas que comprometieron su columna vertebral y otras partes de su cuerpo, Epiphany se mantuvo aferrada a la vida, sin perder de vista a sus pequeños.

Su recuperación, que parecía improbable, se transformó en un esfuerzo colectivo, con miles de dólares recaudados gracias a la generosidad de quienes decidieron apoyar la recuperación de esta familia.

El pasado 5 de enero, la fundación Streetdog Foundation recibió una llamada de emergencia informando sobre una perra pastora alemana de color canela y sus once cachorros, quienes necesitaban ayuda urgente.

“La perra había recibido al menos tres disparos mientras hacía todo lo posible por cuidar de sus pequeños bebés. Las radiografías revelaron que tenía balas alojadas en el brazo, el codo y la caja torácica”, publicó la fundación en su cuenta de Facebook.

A pesar del elevado costo que representaría el caso de la perra, que días después sería nombrada como Epiphany, la fundación decidió intervenir. “¿Cómo íbamos a decir que no a una mamá que luchaba tanto por sus bebés?”, escribieron en una publicación.

Epiphany fue trasladada al Grace Animal Hospital, donde se descubrió que en realidad había recibido cuatro disparos. Uno de ellos impactó en una parte de su columna vertebral, lo que pudo haber dañado su médula espinal, razón por la que inicialmente no podía usar sus patas traseras.

“Mamá es increíblemente dulce, fuerte y centrada en sus bebés a pesar de todo. Se preocupa mucho por su bienestar y está claro que hace todo lo posible por cuidarlos”, señaló la fundación en una actualización del caso del 6 de enero.

Para evitar que los cachorros sobrecargaran a la madre durante su recuperación, los veterinarios rotaron a los pequeños cada dos horas para que se alimentaran en grupos, mientras mantenían a Epiphany con antibióticos y analgésicos suaves para garantizar su comodidad sin afectar la producción de leche.

Los especialistas decidieron posponer una posible cirugía para extraer la bala cercana a su columna, con la esperanza de que su recuperación inicial mejorara sus posibilidades a largo plazo.

El 7 de enero, la fundación compartió una noticia alentadora: Epiphany logró pararse y comenzó a caminar nuevamente. Para el 9 de enero, tanto la madre como sus cachorros estaban en condiciones estables. “Continuamos visitándolos dos veces por noche para asegurarnos de que todos estén bien, especialmente ahora que una tormenta de nieve se aproxima a la zona”, comunicó el equipo.

El 12 de enero, Streetdog Foundation anunció que la perrita ahora llevaba el nombre de Epiphany, en honor al día en que recibió una segunda oportunidad.

“Epiphany ha estado muy ocupada ganándose corazones y recuperándose. Ha dejado oficialmente la vía intravenosa, sus heridas están cicatrizando y siente menos dolor. Todavía le cuesta un poco andar, pero esta mamá inteligente y decidida se lo toma todo con calma”, detallaron.

La asociación confirmó que todos los cachorros estaban saludables y agradeció a la comunidad por su apoyo, el cual permitió recaudar 15 mil dólares para cubrir los gastos médicos de Epiphany y sus crías.

De acuerdo con el canal tres de la cadena CBS en Memphis, la policía local recibió una llamada el pasado 5 de enero sobre un animal herido en la cuadra 5100 de Aureen Drive, al suroeste de Memphis. Según el reporte policial, un hombre en la residencia declaró que disparó al perro callejero porque este se abalanzó hacia él, su esposa y sus hijos.

El caso de Epiphany y sus crías generó un intenso debate en redes sociales, donde usuarios expresaron su indignación y cuestionaron las circunstancias que llevaron a que la perra resultara herida de gravedad.

Una publicación en Facebook destacó el sentimiento de frustración compartido por muchos: “Ojalá el artículo que leí hubiera dicho que el tirador fue acusado de crueldad animal. ¡¿Cuatro veces para detener a un perro?! Protegiendo a sus bebés de algo que probablemente estaba haciendo y que indicaba una amenaza para sus cachorros… Gracias a Dios por la persona que informó sobre el animal herido y por ustedes. No puedo imaginar el dolor que estaba sintiendo y probablemente lo sentirá por un tiempo”.

Otra persona comentó, cuestionando la falta de acciones legales contra el responsable: “Espero que la persona que hizo esto sea procesada con todas sus fuerzas. Por este acto tan cruel que hizo, fue innecesario dispararle. Es posible que haya estado tratando de proteger a sus bebés. Quizás solo tenía hambre. Pero qué acto egoísta y sin sentido…”