Los animales por algún tiempo fueron el atractivo principal de los circos, en ellos se presentaba la majestuosidad de la especie y las habilidades que tenían pues al haberles entrenado desde cachorros podían lograr hazañas sorprendentes.
Sin embargo, algunos circos se hicieron conocidos por tener conductas irresponsables hacia las diferentes especies, pues habitaban en espacios reducidos, con mala o nula alimentación, además de trastornos generados por años de maltrato.
Situaciones como estas no son recientes, pues en España el periodista del periódico ABC, Luis de Armiñán, documentó en 1954 un grave caso de maltrato a los animales que pertenecieron a uno de estos espectáculos que fueron abandonaron en las calles de Barcelona.
“Cuando el hombre es fiera”
Francisco Sert, presidente de la Liga para la Protección de Animales y Plantas llamó a Luis Armiñán para alertar de la situación en la que se encontraban varias especies abandonadas dentro de carretones azules, las cuáles según el diario ABC eran jaulas de un gran circo.
“En la más próxima hay un mono”, se leía en la nota de Armiñán “un papión de aguda jeta, ojillos malos y nalgas bermejas, que me mira como con esperanza. Tirita un poco y tiende la mano de viejo suplicante”.
Uno de los trabajadores, el cual iba acompañado de otro, comentó “Ya queda poco. Ahora mismo estaba salando esa piel que justifica una muerte más. Ahí, en aquel hoyo, están enterrados los que han muerto”.
El otro trabajador preguntó de qué habían fallecido a lo que el primero respondió “Han muerto de hambre. Un elefante se comió las astillas del techo de su jaula y... fíjese cómo agoniza este. Ya no puede comer. Yo le doy parte de la ración del pan que me corresponde, pero no la traga”.
Aquel trabajador se refería a un oso negro, que aunque se acercaba al pan se alejaba y se recostaba agonizante. Otras de las especies que ahí se encontraban eran tres osos polares, un oso pardo que compartían jaula y estaban en un estado deplorable.
Según el diario ABC, el circo era de origen alemán que durante una gira por Europa logró asombrar a la sociedad española. Pero, por el invierno no pudieron continuar. Armiñán afirma que “su zoo albergaba más de cuarenta animales.
Los datos más justos acusan el deceso de todos los monos, menos el papión, tres elefantes, dos leones, varios osos, dos puercoespines, perros y caballos. La última leona, después de varios días sin alimento, se comió los restos del último caballo.
Ahora quedan los tres perros dálmatas, dos osos blancos, uno pardo, ese tibetano que agoniza y un cóndor. Todos condenados a una muerte, por falta de cuidado y comida, que no se hará esperar, afortunadamente, para ellos”.
El periodista presumía de la quiebra de este circo era la principal causa de que hubieran abandonado a los animales, sin embargo también señaló que “el Ayuntamiento de Madrid votó un crédito para el traslado de los bichos a El Retiro, y no sé por qué no se hizo”.
Luis de Armiñán concluyó su artículo de forma cruda “Me acerco al oso tibetano que se muere. Hasta acaricio sus pelos apelotonados, sucios, fríos de sudor y de agonía. Abre los ojuelos y los entorna. Nos vamos. El papión nos sigue hasta la puerta con sus ojillos curiosos y tristes. Francis, un antiguo enano del circo que permaneció en el lugar, asoma la cabeza enfurruñada y dice: ‘Este, un día, amanece asfixiado’. La puerta se cierra, y se abre un interrogante hacia la crueldad del hombre”.
El destino de los animales de circo
El retiro de animales de los circos en México, se llevó a cabo en el año 2015. Esto abrió una brecha, pues aunque la idea era salvarlas, pero el diario mexicano Milenio tiempo después afirmó que el 80% de las especies recuperadas fallecieron y fue reafirmado con el testimonio de la animalista y activista independiente Yael Ruiz.
La activista afirmó en el podcast “Diagnóstico” con el doctor Octavio Arroyo o mejor conocido en redes como Mr. Doctor que “hay otra versión de la historia en la que muchos cirqueros sí sufrieron porque les quitaron a sus animales y no solo porque se los quitaron, sino porque muchos murieron [...] yo estoy de acuerdo en que no se debe lucrar con los animales porque hay gente que abusa y lucra y ¿Cómo controlas eso?”
También señaló que “los intentan colocar en zoológicos, UMAS (Unidades de Manejo Animal) pero, me parece que hubo una mala operación y no supieron qué hacer con todos los animales y es cuando se empieza a manejar la noticia de que los animales estaban muriendo”.
El circo tuvo que reinventarse para suplir todos los espectáculos con animales, dando más foco a otras disciplinas artísticas como los trapecistas y también llevaron a su escenario avances tecnológicos con la finalidad de mantenerse vigentes en las familias amantes de las artes circenses.