Tormentas intensas ponen en alerta al sur de EEUU y obligan a activar recursos de emergencia en varios estados

Las previsiones oficiales anticipan varios días de inestabilidad atmosférica con acumulados superiores a lo habitual, elevando el riesgo de crecidas rápidas en zonas urbanas y rurales de la región

Guardar
El sur de Estados Unidos
El sur de Estados Unidos enfrenta alerta por lluvias intensas e inundaciones repentinas en Texas, Oklahoma, Arkansas, Missouri y Kansas. (Imagen Ilustrativa Infobae)

El sur de Estados Unidos enfrenta esta semana una alerta por lluvias intensas e inundaciones repentinas que afecta a regiones de Texas, Oklahoma, Arkansas, Missouri y Kansas. El fenómeno se produce tras más de dos semanas sin precipitaciones significativas en ciudades como Oklahoma City, Tulsa y Shreveport. Las autoridades meteorológicas consideran relevante la situación debido a la sequía previa y la previsión de acumulados pluviales que podrían causar afectaciones en infraestructura y transporte.

De acuerdo con el Servicio Nacional de Meteorología de Estados Unidos (NWS) y el Servicio Meteorológico Nacional (NOAA), desde el miércoles 20 de noviembre hasta la noche del viernes 22 se esperan tormentas eléctricas de moderada a fuerte intensidad, ráfagas de viento, granizo y acumulados de entre 50 y 75 milímetros (2 a 3 pulgadas) en una franja que va desde el centro de Texas hasta Missouri. Estas previsiones han sido difundidas por The Weather Channel y reforzadas en informes del Centro de Predicción de Tormentas (SPC) de NOAA.

Las condiciones meteorológicas inusuales se explican por la sucesión de sistemas de baja presión desde el oeste, combinados con la persistencia de una racha seca que, en el caso de Oklahoma, Luisiana y el norte de Texas, no presentaba lluvias cuantificables desde finales de octubre, según estadísticas oficiales de NOAA. El antecedente inmediato de sequía contribuyó a alertar a las autoridades locales por una posible respuesta exacerbada del terreno, con riesgo de crecidas rápidas y afectación de vías de comunicación críticas en la región.

¿Cuáles son las principales zonas bajo alerta?

El Centro de Predicción de Tormentas de NOAA incluyó desde la mañana del 20 de noviembre en su zona de vigilancia a localidades del centro y norte de Texas, sur de Oklahoma, el extremo suroeste de Arkansas, el oeste de Louisiana, el este de Kansas y parte del sur de Missouri. Ciudades como Dallas, San Antonio, Oklahoma City, Tulsa y Shreveport figuran en el rango de áreas con mayor probabilidad.

En declaraciones recogidas por The Weather Channel, representantes de NOAA informaron que “la combinación de humedad con el avance de un sistema frontal puede generar núcleos de tormenta capaces de producir granizo de gran tamaño junto a máximos acumulados locales de hasta 125 milímetros (5 pulgadas) durante la jornada del viernes”.

La sequía previa en Oklahoma,
La sequía previa en Oklahoma, Texas y Luisiana agrava el riesgo de inundaciones ante la llegada de tormentas fuertes, según NOAA. (Jon Shapley/Houston Chronicle via AP)

¿Qué datos respaldan el pronóstico y el nivel de alerta?

Según estadísticas disponibles en la plataforma NOAA Precipitación Observada, desde el 30 de octubre hasta el 20 de noviembre de 2025, las estaciones automáticas de Oklahoma City, Tulsa y Shreveport no han registrado precipitaciones cuantificables, lo que representa una anomalía respecto a promedios históricos para estas fechas, donde se suelen registrar entre 40 y 60 milímetros en dicho lapso. El Centro de Predicción de Tormentas (SPC) asignó nivel 1 de 5 al riesgo general de tiempo severo en la región, que implica posibilidad de incidentes localizados de tormenta fuerte o muy fuerte, según los estándares federales.

Los informes del Weather Prediction Center (WPC) del NWS establecieron además que partes del centro de Texas continúan bajo vigilancia de inundación hasta al menos el viernes 22 de noviembre. “Se espera que, con suelos resecos y baja absorción, cualquier acumulación rápida de agua pueda generar inundación en áreas urbanas y carreteras”, sostuvo el informe recogido en The Weather Channel.

¿Qué decisiones y reacciones institucionales se han registrado?

El gobernador de Texas, Greg Abbott, activó recursos estatales de emergencia para responder a posibles incidentes relacionados con las lluvias. A través de un comunicado difundido por su despacho y destacado por The Weather Channel, se informó que “todos los recursos coordinados del Departamento de Manejo de Emergencias de Texas (TDEM, por sus siglas en inglés) permanecen en estado de alerta y listos para desplegarse donde sea necesario”.

El Servicio Meteorológico Nacional recomendó a la población monitorear el desarrollo de las condiciones a través de medios oficiales y evitar desplazamientos innecesarios por zonas proclives a inundaciones. Según el reporte institucional, “las áreas bajas y los caminos propensos a acumulaciones de agua pueden tornarse peligrosos con poca antelación”.

El Servicio Meteorológico Nacional pronostica
El Servicio Meteorológico Nacional pronostica acumulados de hasta 125 milímetros y granizo de gran tamaño en ciudades como Dallas y Tulsa. (AP Newsroom)

¿Qué cambios provoca esta situación y qué permanece igual en el corto plazo?

La llegada del sistema de baja presión rompe una racha de más de 20 días sin lluvias relevantes en vastas áreas del centro sur de Estados Unidos. El patrón previo, caracterizado por cielos despejados y temperaturas normales para la temporada, dará paso a una fase de inestabilidad climática que, según el pronóstico de The Weather Channel, podría extenderse hasta el sábado 23 de noviembre en algunas zonas.

Las alertas por sequía y restricción de uso de agua, vigentes en varias comunidades rurales y urbanas, permanecen activas hasta la verificación de las lluvias acumuladas en los próximos días. Las autoridades subrayan que la mejora hidrológica dependerá tanto de la distribución espacial de las precipitaciones como de su intensidad.

¿Cómo se comparan estos eventos con registros pasados?

De acuerdo con The Weather Channel y datos históricos de NOAA, la ausencia de lluvias significativas en tramos de otoño no resulta inédita para la región, aunque el patrón combinado de sequía prolongada y lluvias intensas en intervalos cortos incrementa la probabilidad de inundaciones. En 2016, eventos similares provocaron daños materiales a infraestructuras viales y urbanas en el área de Dallas-Fort Worth. El actual nivel de preparación institucional, según los comunicados de NOAA y el gobierno de Texas, considera esas experiencias para anticipar posibles complicaciones.

¿Qué impactos puede generar para la población y cuáles son los siguientes pasos?

Las alertas y avisos informados por NOAA, el Servicio Meteorológico Nacional y gobiernos estatales incluyen advertencias para la circulación automovilística, suspensión temporal de actividades al aire libre y cancelaciones eventuales de vuelos y servicios de transporte en función del avance de las tormentas. “El pronóstico de intensidades variables implica un monitoreo permanente y la posibilidad de nuevas actualizaciones conforme evolucionen los sistemas frontales”, apuntó el reporte más reciente del SPC citado por The Weather Channel.

A partir de las previsiones para el viernes 22 de noviembre, las autoridades evalúan la situación de cada condado para flexibilizar o reforzar las medidas de atención de emergencias en función de reportes puntuales de afectaciones por inundaciones, cortes energéticos o daños materiales derivados de las tormentas.