
Las autoridades de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) han reiterado la importancia de cumplir con las restricciones sobre ciertos productos agrícolas al ingresar al país. La agencia ha establecido medidas estrictas para prevenir la propagación de enfermedades y plagas que puedan afectar la agricultura local. Las multas por incumplir estas normativas pueden ascender hasta los 10.000 dólares, según informaron autoridades a través de un comunicado de prensa.
“Se prohíbe a los viajeros traer huevos frescos, pollo crudo o aves vivas a EEUU desde México”, subrayaron los funcionarios de la oficina fronteriza a finales de febrero.
El anuncio tiene lugar en medio de un significativo aumento de la cantidad de alimentos prohibidos traídos por viajeros desde México. Únicamente en la Oficina de Campo de San Diego, los agentes han observado un aumento del 158 % en las intercepciones de huevos desde el año fiscal 2024.

“CBP insta a los viajeros a tener en cuenta que ciertos productos agrícolas, incluidos los huevos crudos de México, tienen prohibida la entrada a Estados Unidos. Los artículos no declarados pueden ser objeto de multas”, explicaron los funcionarios.
Especialistas en agricultura de la CBP desempeñan un papel crucial en la inspección de productos que cruzan las fronteras de Estados Unidos. Su labor consiste en analizar y detectar cualquier artículo que pueda representar un riesgo para la seguridad agrícola del país. Estas restricciones buscan evitar la introducción de enfermedades y plagas que podrían tener un impacto devastador en los cultivos y en la economía agrícola.
El incumplimiento de estas normativas puede resultar en sanciones económicas considerables, las cuales pueden alcanzar hasta los 10.000 dólares. Dichas penalizaciones buscan disuadir a los viajeros de intentar ingresar productos restringidos sin declararlos.
Sidney Aki, director de Operaciones de Campo de CBP en San Diego, explicó que mantener informado al público viajero es algo fundamental “para salvaguardar nuestra industria agrícola”, al mismo tiempo que facilitan el comercio y los viajes legítimos.

Estadísticas proporcionadas por el Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal del Departamento de Agricultura de EEUU, con corte al 19 de marzo, demostraron que un brote de gripe aviar afectó a millones de aves domésticas en el país, lo que ocasionó una reacción en cadena, aumentando el precio de los huevos.
El brote, considerado como el peor registrado hasta la fecha, es un recordatorio de cómo las actividades humanas (transporte de aves y productos aviares) contribuyen en la transmisión de enfermedades.
“Artículos como jaulas de pájaros sucias o cartones de huevos usados pueden propagar enfermedades, incluida la enfermedad de Newcastle virulenta”, añadieron los funcionarios de la CBP.
Sin embargo, los viajeros pueden llevar alimentos permitidos desde México a Estados Unidos a través de un puerto de entrada de pasajeros únicamente si son para consumo personal, aquellos que son importados con fines comerciales, ya sea reventa o distribución, deben importarse “debidamente en una instalación de carga”.
La importancia de seguir estos lineamientos reside en que ciertos productos agrícolas prohibidos pueden albergar plagas y enfermedades animales foráneas capaces de dañar gravemente los cultivos, ganado o medio ambiente estadounidense, al igual que “un gran sector de la economía nacional”.
“Todos los viajeros que ingresan a EEUU deben declarar las carnes, frutas, verduras, plantas, semillas, tierra, animales, así como los productos vegetales y animales (incluidas las sopas y sus derivados) que lleven consigo”, según explicaron agentes de la CBP en el apartado de productos agrícolas del sitio web oficial del servicio.
Todos los productos que no se declaren serán confiscados y desechados por especialistas de la CBP, además, pueden imponerse sanciones civiles que son capaces de alcanzar hasta 1.000 dólares en caso de ser la primera vez que se infringen las leyes.