
Michael Burch, de 69 años, murió en abril de 2023 dentro de una celda en el condado de Huérfano, en el estado de Colorado, tras sufrir graves lesiones internas durante un altercado con un agente del sheriff y no recibir tratamiento médico durante al menos siete días. La muerte fue clasificada como homicidio, pero no se presentaron cargos penales contra los funcionarios implicados. La familia presentó una demanda federal alegando que Burch fue víctima de negligencia médica, abuso institucional y violación de sus derechos constitucionales, según documentó AP.
El incidente tuvo lugar después de que Burch, un exagente penitenciario del estado de California, fuera arrestado el 25 de marzo de 2023 por comportamientos erráticos, incluyendo conducir hasta la casa de desconocidos y blandir un mazo de goma. Durante su detención en el centro penitenciario del condado de Huérfano, el 28 de marzo se enfrentó a un oficial tras negarse a soltar un lápiz. De acuerdo con grabaciones de la cámara corporal del agente, este le advirtió: “Suéltalo o te soltamos a ti”, antes de utilizar una pistola Taser.
Según la demanda, después del uso del Taser, Burch se abalanzó hacia el agente, lo que derivó en un forcejeo que terminó con ambos cayendo al suelo. El video muestra cómo el cuerpo de Burch golpeó un banco de acero, lo que provocó la fractura de seis costillas en su costado derecho y el colapso de su pulmón derecho, sin que posteriormente se le brindara atención médica adecuada.
La autopsia reveló fracturas múltiples, pulmón colapsado y asfixia progresiva
Una autopsia determinó que seis costillas del lado derecho estaban rotas y que el pulmón derecho de Burch se había colapsado, lo que le provocó una muerte lenta por asfixia. Según el informe judicial, el deterioro físico de Burch fue tal que su cuerpo dejó de utilizar el pulmón afectado, que se redujo a la mitad de su tamaño habitual. La familia afirma que sus órganos internos fueron dañados por las costillas rotas, lo que hizo que cada respiración se volviera dolorosa e insuficiente para mantener su oxigenación.
AP reportó que los abogados de Burch describieron los últimos días de su vida como un sufrimiento continuo. “El simple acto de respirar se volvió tan doloroso que su cuerpo dejó de usar el pulmón derecho”, señalaron en el documento judicial.
El fiscal del distrito, Henry Solano, declinó presentar cargos contra el agente involucrado, basándose en las leyes de defensa propia del estado. No obstante, la demanda afirma que la negligencia institucional de los responsables del centro penitenciario fue determinante para la muerte de Burch.

Paramédicos y personal médico no evaluaron adecuadamente sus lesiones
Tras el incidente, Burch fue evaluado brevemente por paramédicos que llegaron a la celda. A pesar de que se quejaba de dolor extremo en el pecho y decía que sus costillas estaban “aplastadas”, los sanitarios no lo trasladaron a un hospital. La demanda señala que los paramédicos no escucharon sus pulmones con un estetoscopio, no tomaron sus signos vitales ni realizaron una inspección médica exhaustiva. Imágenes de la cámara corporal muestran a uno de ellos levantándole brevemente la camisa, pero sin mayor intervención.
Posteriormente, fue trasladado a otra celda, donde su estado se fue agravando. El 1 de abril, Burch dijo a un capitán del sheriff que apenas había sobrevivido la noche anterior. Como respuesta, fue evaluado por videollamada por una enfermera ubicada en Misisipi, contratada por una empresa de salud externa para atender a presos. La interacción se centró únicamente en el estado mental de Burch y no se le pidió mostrar el pecho ni se realizó evaluación física alguna, según el texto de la demanda citado por AP.
Una semana sin tratamiento médico tras el incidente con el agente
Burch permaneció siete días sin atención médica en su celda hasta que fue hallado sin vida el 4 de abril de 2023. La familia sostiene que durante ese periodo, sus condiciones físicas empeoraron hasta provocar su muerte. El suelo de la celda era de concreto y no había indicios de que hubiese recibido medicamentos o algún tipo de auxilio.
La demanda nombra como responsables a los comisionados del condado de Huérfano, a la oficina del sheriff, a agentes individuales, a los paramédicos y al hospital para el que trabajaban, así como a las enfermeras y a la organización sin fines de lucro contratada para brindar atención médica en la cárcel. Todos ellos están acusados de contribuir a las lesiones mortales de Burch y de no haber hecho nada para remediarlas, lo que constituye una supuesta violación de sus derechos constitucionales.

La familia de Burch denuncia condiciones inhumanas y falta de vigilancia
Uno de los abogados de la familia, Qusair Mohamedbhai, afirmó que Burch tenía antecedentes de problemas de salud mental que habían afectado su relación con sus hijos. No obstante, la familia mantenía la esperanza de que pudiera recomponer los vínculos con sus nietos. “Ahora tienen pesadillas sobre lo dolorosos que fueron los últimos días de su padre”, declaró el abogado.
Mohamedbhai también calificó los hechos como propios de un sistema penitenciario inhumano. “Esto es un comportamiento propio de un gulag que simplemente no debería existir en ningún lugar”, dijo en declaraciones recogidas por AP.
El abogado que representa al condado y a la oficina del sheriff, Eric Ziporin, se negó a comentar el caso, al igual que los representantes del hospital y de la empresa sanitaria involucrada, según informó la agencia de noticias.
La demanda se encuentra ahora en la jurisdicción federal, mientras la familia de Burch busca responsabilidades civiles por lo que consideran una cadena de omisiones fatales por parte de las autoridades locales y del sistema médico contratado para atender a las personas privadas de libertad.