Las ventas de vehículos eléctricos de Tesla en Europa se desplomaron un 49% durante los dos primeros meses de 2025 en comparación con el mismo periodo del año anterior, según informó la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA).
El retroceso se produce en un contexto de crecimiento sostenido del mercado de autos eléctricos en el continente, que registró un aumento general del 28,4% en las matriculaciones de vehículos 100 % eléctricos. De acuerdo con The Associated Press, entre enero y febrero de este año, Tesla entregó 19.046 unidades en los países europeos, frente a las 37.311 del mismo periodo en 2024.
Diversas fuentes del sector atribuyen este retroceso a varios factores acumulados. Entre ellos destacan la falta de renovación en la gama de productos de Tesla, que no ha introducido nuevos modelos significativos en el mercado europeo en los últimos años, así como la creciente presión competitiva de marcas consolidadas y emergentes, incluyendo al fabricante chino BYD.
El avance de BYD, considerado uno de los principales rivales de Tesla a nivel mundial, ha sido particularmente notorio. La empresa china reportó ingresos récord por 777.100 millones de yuanes (107.000 millones de dólares) en 2024, impulsados por un incremento del 40% en las ventas combinadas de vehículos eléctricos e híbridos.
Además, a principios de marzo, BYD presentó un sistema de carga ultrarrápida que, según la empresa, permite recargar un vehículo con una velocidad comparable al tiempo requerido para llenar un depósito de gasolina.
La estrategia tecnológica de BYD ha sido reconocida como un elemento clave para consolidar su posición en el mercado europeo, donde la autonomía y el tiempo de carga siguen siendo factores decisivos para los consumidores.
Controversias políticas y protestas contra Musk
A los problemas comerciales y técnicos se suma un creciente rechazo hacia Elon Musk en el ámbito político y social europeo. El consejero delegado de Tesla ha estado en el centro de la polémica tras expresar públicamente su apoyo al partido Alternativa para Alemania (AfD), de extrema derecha, durante las elecciones nacionales celebradas en febrero en Alemania, según reportó el diario The Hill.
Este respaldo generó una ola de críticas por parte de líderes políticos alemanes y medios de comunicación. Además, provocó manifestaciones en concesionarios y fábricas de Tesla, tanto en Alemania como en otros países europeos, donde grupos de ciudadanos y activistas repudiaron las posturas del empresario.
En paralelo, Musk ha sido blanco de protestas en Estados Unidos, donde su colaboración como asesor del presidente Donald Trump en políticas de reducción del tamaño del gobierno federal también ha generado controversia.
Problemas con el Cybertruck
El deterioro en el rendimiento comercial de Tesla no se limita al mercado europeo. En enero, la compañía anunció su primera caída anual en ventas globales en más de una década, lo que alimentó la preocupación entre inversores y analistas del sector automotriz.
Uno de los lanzamientos más esperados de la firma, el Cybertruck, ha estado marcado por una serie de problemas técnicos. La semana pasada, Tesla emitió una llamada a revisión que afectó a casi todos los Cybertrucks entregados hasta la fecha.
El motivo fue la posibilidad de que los paneles laterales del parabrisas se desprendan mientras el vehículo está en circulación. Esta fue la octava campaña de retirada del modelo desde que comenzaron las entregas hace poco más de un año.
Según expertos del sector, las repetidas fallas podrían tener un efecto negativo sobre la confianza del consumidor en la marca, especialmente en un momento en que la competencia ofrece vehículos con estándares de calidad cada vez más altos.
El descenso de Tesla en Europa contrasta con el dinamismo general del mercado de vehículos eléctricos en la región. Las cifras de la ACEA muestran que los coches eléctricos a batería ganan terreno de forma sostenida, impulsados por las políticas públicas de descarbonización, los incentivos fiscales y la creciente preocupación medioambiental de los consumidores.
Fabricantes como Volkswagen, Renault, Stellantis y BMW han reforzado sus líneas de producción eléctrica, mientras que nuevas empresas como Nio, XPeng y Lucid Motors intensifican su presencia en el continente. El crecimiento del número de estaciones de carga y las mejoras en las infraestructuras también han contribuido a que más conductores europeos consideren viable el cambio hacia la movilidad eléctrica.
