
El estado de Nueva York continúa fortaleciendo su industria de cannabis con la firma de dos nuevas leyes que buscan expandir el programa de mercados de agricultores de marihuana, permitiendo la realización de eventos emergentes y fomentando colaboraciones más amplias entre negocios con licencia.
Según informó el portal especialziado Marijuana Moment, la gobernadora Kathy Hochul dio su aprobación final a estas medidas el pasado jueves, consolidando un marco legal que busca acelerar el acceso de los consumidores a productos de cannabis y apoyar a los productores locales. Las leyes, impulsadas por la senadora Michelle Hinchey y la asambleísta Donna Lupardo, introducen cambios significativos al programa original, que fue autorizado por primera vez en 2023.
Este programa nació como una respuesta a los retrasos en la apertura de dispensarios tradicionales, permitiendo a los productores llevar sus productos directamente al mercado. Sin embargo, la legislación inicial tenía limitaciones que ahora han sido revisadas para fomentar una mayor participación y flexibilidad en los eventos.
Cambios clave en el programa
De acuerdo con Marijuana Moment, las nuevas leyes establecen que los minoristas con licencia deberán asociarse con al menos un cultivador y un procesador para participar en estos eventos, eliminando la restricción previa que limitaba las asociaciones a un solo socio por categoría. Además, los organizadores de estos eventos estarán obligados a vender productos cultivados o procesados por sus socios, aunque también podrán ofrecer otros productos.

Otro cambio importante es que cada minorista que participe en un evento deberá obtener un permiso individual, incluso si hay múltiples minoristas operando en el mismo lugar. Este requisito busca garantizar que todos los participantes cumplan con las normativas y promuevan la colaboración con los productores y procesadores locales. Las leyes entrarán en vigor 120 días después de su promulgación, marcando un nuevo capítulo en la regulación del cannabis en el estado.
Un mercado en expansión
El programa de mercados de agricultores de cannabis fue concebido como una solución temporal para enfrentar los retrasos en la implementación del mercado de uso adulto en Nueva York, que se vio afectado por litigios y otros obstáculos. Según ABC News Nueva York, desde el lanzamiento del mercado, las ventas han alcanzado un total de 1.000 millones de dólares, lo que refleja un crecimiento sostenido a pesar de los desafíos iniciales.
Las autoridades estatales han destacado que este crecimiento ha sido acompañado por un aumento significativo en la aprobación de licencias y un esfuerzo exitoso para combatir los establecimientos no autorizados, que proliferaron en los primeros meses tras la legalización. Además de las nuevas leyes, el estado ha lanzado un programa de subvenciones que otorgará hasta 30.000 dólares a negocios minoristas de cannabis para cubrir costos iniciales.
Sin embargo, no todo ha sido positivo en el panorama regulatorio. Según Marijuana Moment, un grupo de empresas con licencia bajo el programa de dispensarios minoristas de uso condicional (CAURD), solicitó a la gobernadora que perdone decenas de millones de dólares en préstamos de alto costo otorgados a través de un fondo de equidad social creado por el estado.

Líderes como la asambleísta Crystal Peoples-Stokes han señalado la necesidad de extender el apoyo financiero a los titulares de licencias CAURD, muchos de los cuales enfrentan dificultades económicas debido a los altos costos de estos préstamos.
Por otro lado, organizaciones como la NAACP de Nueva York, la Black Cannabis Industry Association y la Drug Policy Alliance han criticado lo que consideran un enfoque regulatorio que favorece a grandes corporaciones en detrimento de pequeños negocios y emprendedores afectados por arrestos relacionados con la marihuana en el pasado.
Nuevas iniciativas para fortalecer la industria
En un esfuerzo por abordar las barreras financieras que enfrentan las empresas de cannabis, los reguladores estatales han lanzado un recurso para conectar a negocios con licencia con instituciones bancarias dispuestas a trabajar con la industria, a pesar de las restricciones impuestas por la prohibición federal.
Además, en 2023, la gobernadora Hochul firmó una ley que facilita a las instituciones financieras colaborar con negocios de cannabis al permitir que la Oficina de Gestión del Cannabis (OCM) comparta información sobre licencias y solicitantes con su consentimiento.
Mientras tanto, el estado sigue avanzando en otras áreas relacionadas con el cannabis y las políticas de drogas. El Senado estatal aprobó recientemente un proyecto de ley que busca ampliar las protecciones de vivienda para pacientes registrados de marihuana medicinal, evitando desalojos basados únicamente en el uso legal de cannabis.
Asimismo, se han presentado propuestas para despenalizar ampliamente la posesión de drogas a partir de 2025, así como proyectos de ley que abogan por la legalización de sustancias enteogénicas como la psilocibina y la ibogaína para adultos mayores de 21 años.
En el ámbito del cumplimiento de la ley, una propuesta presupuestaria reciente de la gobernadora Hochul ha generado controversia al plantear que los policías puedan obligar a los conductores a realizar pruebas de drogas si detectan olor a marihuana. Esta medida ha sido criticada tanto por defensores de la reforma como por líderes legislativos, quienes consideran que podría ser un retroceso en los avances logrados en materia de justicia social.