
El USS Gravely, un destructor de misiles guiados de la clase Arleigh Burke, ha sido enviado al área de operaciones del Comando Norte de Estados Unidos (Northcom) como parte de un esfuerzo estratégico para fortalecer la seguridad fronteriza y proteger la soberanía territorial del país.
Según informó el Pentágono, el despliegue comenzó el 15 de marzo de 2025, cuando el buque partió de la Estación de Armas Navales de Yorktown, en Virginia, con destino al Golfo de México.
De acuerdo con declaraciones del portavoz principal del Pentágono, Sean Parnell, esta operación subraya la importancia de controlar no solo las fronteras terrestres, sino también las aguas territoriales de Estados Unidos.
Misiones de interdicción de drogas y colaboración con la Guardia Costera

“Es igualmente importante controlar nuestras aguas territoriales, y este despliegue apoya directamente la misión del Comando Norte de EEUU de proteger nuestra soberanía”, afirmó Parnell en una conferencia de prensa.
Una de las principales tareas asignadas al USS Gravely en esta operación será la interdicción de drogas en el Golfo de México y áreas circundantes. Según explicó el teniente general de la Fuerza Aérea, Alexus Grynkewich, director de operaciones del Estado Mayor Conjunto, el buque trabajará en estrecha colaboración con la Guardia Costera de Estados Unidos (USCG) en estas misiones.
El destructor contará con un destacamento de aplicación de la ley marítima de la Guardia Costera, conocido como LEDET (por sus siglas en inglés), que desempeñará un papel clave en las operaciones. Según un comunicado reciente de Northcom, estos equipos, establecidos en 1982, realizan una amplia gama de misiones de interdicción marítima, que incluyen esfuerzos contra la piratería, protección de fuerzas militares, respuesta humanitaria y operaciones de seguridad nacional.
“El USS Gravely se dirigirá al Golfo de México y sus alrededores y participará en la misión de interceptación de drogas de la Guardia Costera de Estados Unidos”, declaró Grynkewich.
Grynkewich destacó la relevancia de esta colaboración, señalando que el USS Gravely estará directamente involucrado en la interceptación de cargamentos de drogas que intenten ingresar al país.
Los planes que complementan el despliegue del USS Gravely

En paralelo al despliegue del USS Gravely, Northcom activó la Fuerza de Tarea Conjunta Frontera Sur (JTF-SB), que asumió el control de varias actividades y fuerzas militares previamente gestionadas por la Fuerza de Tarea Conjunta Norte. Este cambio estratégico busca optimizar los esfuerzos para garantizar la seguridad en la frontera sur de Estados Unidos.
Un comunicado de Northcom detalla que la transferencia de autoridad a la JTF-SB permite una mayor coordinación y eficacia en las operaciones del Departamento de Defensa (DOD).
“La transferencia de autoridad... alinea los esfuerzos para sellar la frontera sur y repeler la actividad ilegal bajo una única fuerza de tarea conjunta responsable de operaciones a gran escala, ágiles y multidominio, lo que permitirá operaciones del DOD más efectivas y eficientes”, según compartieron los funcionarios en un comunicado de prensa reciente.
El general Gregory M. Guillot, oficial superior del Northcom, calificó esta medida como un paso crucial en los esfuerzos interinstitucionales para proteger la integridad territorial de Estados Unidos.
“Este es un paso importante en los esfuerzos de todo el gobierno para sellar la frontera sur y mantener la soberanía e integridad territorial de EEUU”, aseguró Guillot.
A pesar de que las autoridades han reportado una disminución del 93% en los cruces fronterizos ilegales, el Pentágono enfatizó que las operaciones de seguridad continuarán hasta alcanzar un control total de la frontera sur.
“El DOD se enorgullece de defender nuestra patria y la soberanía territorial de EEUU”, concluyó Parnell