
Un equipo de científicos de la Universidad de Arizona Health Sciences ha descubierto que ciertos terpenos presentes en la planta de Cannabis sativa podrían proporcionar un tratamiento eficaz contra el dolor crónico sin los efectos psicoactivos del tetrahidrocannabinol (THC). Según un estudio publicado en Pharmacological Reports, estos compuestos naturales han demostrado reducir significativamente el dolor en modelos animales de fibromialgia y dolor postoperatorio, con el geraniol como el más prometedor en términos de alivio del dolor.
La investigación fue liderada por John Streicher, profesor en el Departamento de Farmacología de la Universidad de Arizona y miembro del Comprehensive Center for Pain & Addiction. En estudios previos, Streicher y su equipo habían explorado los efectos analgésicos de los terpenos en modelos de dolor inflamatorio y neuropático inducido por quimioterapia. Con esta nueva investigación, el equipo amplió su enfoque para evaluar el impacto de los terpenos en el dolor asociado a la fibromialgia y a cirugías.
“Nuestra investigación muestra que los terpenos no son efectivos para aliviar el dolor agudo causado por lesiones repentinas, como golpearse un dedo o tocar una superficie caliente. Sin embargo, observamos una reducción significativa en el dolor cuando se utilizan para tratar el dolor crónico o patológico”, explicó Streicher en un comunicado recogido por Pharmacological Reports.

Los terpenos como alternativa en el tratamiento del dolor crónico y postquirúrgico
Los terpenos son compuestos naturales que dan a las plantas sus aromas y sabores característicos, y en los últimos años han despertado un creciente interés por sus propiedades terapéuticas. En este estudio, los investigadores analizaron cuatro terpenos que se encuentran en concentraciones moderadas a altas en la Cannabis sativa: geraniol, linalool, beta-cariofileno y alfa-humuleno.
Los experimentos, realizados en modelos de ratón, demostraron que todos estos terpenos proporcionaron altos niveles de alivio del dolor, aunque en distintos grados. De los cuatro compuestos, el geraniol mostró la mayor eficacia, seguido del linalool, el beta-cariofileno y el alfa-humuleno. Estos hallazgos sugieren que los terpenos podrían representar una alternativa viable para personas que sufren de dolor crónico, especialmente aquellos con fibromialgia, una enfermedad que afecta entre el 2% y el 5% de la población mundial, según un estudio publicado en Healthcare (Basel) en 2023.
El potencial de los terpenos en la fibromialgia, una enfermedad de difícil tratamiento
La fibromialgia es un trastorno musculoesquelético crónico caracterizado por dolor generalizado, fatiga y problemas del sueño. A pesar de su prevalencia, sus mecanismos aún no se comprenden completamente, lo que dificulta el desarrollo de tratamientos eficaces.
“Con la fibromialgia, aún no entendemos completamente qué provoca el estado de dolor, y tampoco hay muchas opciones de tratamiento realmente efectivas”, explicó Streicher en declaraciones a Pharmacological Reports. “Nuestros hallazgos indican que los terpenos podrían ser una opción viable para el tratamiento del dolor asociado a la fibromialgia, lo que podría beneficiar a una población que actualmente está subtratada”.
En Estados Unidos, se estima que alrededor de 4 millones de adultos padecen fibromialgia, según la Oficina de Salud de la Mujer del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU. El descubrimiento de una posible alternativa terapéutica como los terpenos podría representar un avance importante en el manejo del dolor en estos pacientes.

El impacto en el tratamiento del dolor postoperatorio y la reducción del uso de opioides
Otro aspecto destacado del estudio fue el efecto de los terpenos en el dolor postquirúrgico, que se encuentra en la frontera entre el dolor agudo y el crónico. Aunque suele durar poco tiempo, este tipo de dolor puede generar cambios fisiológicos, como una mayor inflamación y sensibilización del sistema nervioso, lo que contribuye a prolongar la sensación de dolor.
Actualmente, los opioides son el tratamiento estándar para el dolor postquirúrgico, pero su uso conlleva importantes riesgos. “Los opioides son muy efectivos para controlar el dolor postoperatorio, pero pueden provocar efectos adversos como el estreñimiento, lo que a su vez aumenta el riesgo de complicaciones postquirúrgicas, como las adherencias intestinales”, explicó Streicher en el estudio.
En un contexto donde se realizan alrededor de 310 millones de cirugías mayores cada año en todo el mundo, según datos publicados en 2020 en el International Journal of Surgery, la posibilidad de contar con una alternativa más segura y eficaz al uso de opioides podría tener un impacto significativo en la medicina del dolor.

El mecanismo de acción de los terpenos y su relación con la cafeína
El estudio también analizó el mecanismo de acción de los terpenos, revelando que actúan a través del receptor adenosina A2a, el mismo receptor que bloquea la cafeína en el sistema nervioso central. Esto sugiere que los terpenos podrían tener un efecto sedante, algo que los investigadores planean explorar en futuros estudios.
El director del Comprehensive Center for Pain & Addiction, Todd Vanderah, subrayó la importancia de este tipo de investigaciones en la búsqueda de nuevos tratamientos para el dolor. “Las plantas, incluido el cannabis, producen cientos de compuestos químicos únicos que aún no han sido explorados en su totalidad para la salud humana”, declaró Vanderah en el informe de Pharmacological Reports.
Además, destacó que muchas de las innovaciones farmacológicas provienen de compuestos naturales. “Un buen ejemplo de esto es el medicamento semaglutida, comercializado como Ozempic, cuyo principio activo fue aislado de un animal del suroeste de EEUU, el monstruo de Gila. Descubrimientos como el de los terpenos, gracias a la investigación en productos naturales, pueden resultar en medicamentos muy útiles”, concluyó Vanderah.

Un posible avance en el manejo del dolor sin efectos psicoactivos
El estudio, financiado por los National Institutes of Health (NIH) bajo la concesión R01AT011517, abre la puerta a nuevas investigaciones sobre el uso de terpenos como analgésicos naturales. A diferencia del THC, estos compuestos no generan efectos psicoactivos, lo que podría facilitar su aceptación médica y su inclusión en tratamientos clínicos sin las restricciones legales asociadas al cannabis.
Con más estudios en camino, los científicos esperan determinar si los terpenos pueden convertirse en una opción terapéutica viable para pacientes con dolor crónico o postquirúrgico, reduciendo la dependencia de los opioides y sus efectos adversos.