Dan tratamiento especial a recién nacidos tras exposición a sarampión en un hospital de Texas

Autoridades sanitarias implementan medidas de emergencia para proteger a los bebés afectados luego de que una mujer enferma interactuara con ellos

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Personal médico refuerza medidas de
Personal médico refuerza medidas de prevención ante el aumento de casos de sarampión en la región. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Un grupo de recién nacidos en el University Medical Center Children’s Hospital de Lubbock, Texas, fue expuesto al sarampión después de que una madre ingresara al hospital para dar a luz sin que los médicos supieran que estaba infectada con el virus. La situación, ocurrida en plena expansión del brote en la región, ha obligado a las autoridades sanitarias a tomar medidas de emergencia para proteger a los bebés y evitar más contagios.

El personal médico del hospital comenzó a administrar a los recién nacidos inyecciones de inmunoglobulina, una terapia de anticuerpos diseñada para ayudar a fortalecer el sistema inmunológico y reducir el riesgo de infección en bebés que han estado expuestos al virus. De acuerdo con un estudio de 2021, este tratamiento ha demostrado ser altamente efectivo en la prevención del sarampión en casos de exposición. Estos bebés no pidieron esta exposición, pero esta es la única manera de protegerlos”, declaró Chad Curry, jefe de capacitación del servicio de emergencias médicas del hospital.

Si bien los representantes del hospital no han dado una cifra exacta de la cantidad de recién nacidos expuestos, se ha confirmado que la paciente con sarampión tuvo contacto con otras madres, bebés y familias dentro del hospital. El virus, considerado uno de los más contagiosos del mundo, puede permanecer activo en el aire o en superficies durante hasta dos horas, lo que aumenta la posibilidad de nuevos contagios.

La exposición al virus en
La exposición al virus en un hospital de Lubbock refuerza la necesidad de medidas preventivas en espacios médicos. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Un brote en expansión que golpea con fuerza al suroeste de EE.UU.

El brote de sarampión que afecta a Texas, Nuevo México y ahora Oklahoma ha crecido rápidamente en las últimas semanas. Según el Departamento de Servicios de Salud de Texas, hasta el viernes se habían registrado 259 casos en el estado, de los cuales 201 corresponden a niños y adolescentes. En Nuevo México, el número de contagios ha ascendido a 35, mientras que Oklahoma confirmó sus primeros dos casos esta semana.

La enfermedad ha cobrado la vida de al menos una niña de seis años en el condado de Gaines, Texas, y las autoridades investigan otro posible fallecimiento en Nuevo México, en un adulto que no estaba vacunado contra el sarampión. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la gran mayoría de los casos registrados en este brote corresponden a personas que no han recibido la vacuna.

El epicentro del brote sigue siendo el oeste de Texas, una zona donde los niveles de vacunación han sido históricamente bajos en comparación con otras partes del país. Las autoridades sanitarias han señalado que la propagación del virus se ha visto favorecida por la falta de inmunización en algunos sectores de la población.

Medidas de emergencia en hospitales y centros de salud

Ante el aumento de casos, los hospitales y centros de salud en Texas han implementado protocolos de emergencia para evitar la propagación del virus en espacios cerrados. En el University Medical Center Children’s Hospital, donde ocurrió la exposición a los recién nacidos, se ha establecido el uso obligatorio de mascarillas en diversas áreas, especialmente en aquellas donde se encuentran pacientes vulnerables.

Además de la administración de inmunoglobulina a los bebés expuestos, los médicos han reforzado la vigilancia de síntomas en pacientes recientes y han iniciado un rastreo de contactos para identificar a todas las personas que pudieron haber estado en riesgo dentro del hospital. La directora del departamento de salud de Lubbock, Katherine Wells, reconoció que este incidente representa un retroceso en los esfuerzos por controlar el brote. “Se siente como si volviéramos al punto de partida”, dijo en una entrevista el viernes.

Los expertos han insistido en que, si bien la inmunoglobulina puede ofrecer protección temporal, no sustituye la vacunación. El jefe de emergencias médicas, Chad Curry, advirtió que los bebés expuestos deberán recibir la vacuna contra el sarampión cuando alcancen la edad recomendada. “Este tratamiento solo protege por un corto período de tiempo. La única protección total es la vacunación”, enfatizó.

Expertos advierten sobre la importancia
Expertos advierten sobre la importancia de la vacunación para evitar nuevos brotes de sarampión. (AP Foto/Julio Cortez)

El desafío de contener el brote y la importancia de la vacunación

El sarampión es una enfermedad altamente contagiosa que puede provocar complicaciones graves, especialmente en bebés, niños pequeños y personas con sistemas inmunológicos debilitados. Entre los síntomas iniciales se incluyen fiebre alta, tos, congestión nasal y conjuntivitis, seguidos de una erupción cutánea característica que se extiende por todo el cuerpo.

Los expertos en salud pública han señalado que la mejor manera de prevenir la propagación del virus es mediante la vacunación masiva. La vacuna contra el sarampión, paperas y rubéola (MMR, por sus siglas en inglés) es segura y altamente efectiva, con una tasa de protección superior al 97% después de la segunda dosis.

En los últimos años, sin embargo, ha habido un aumento en la cantidad de niños no vacunados, lo que ha llevado a un resurgimiento del sarampión en varias partes de Estados Unidos. De acuerdo con los CDC, la desinformación sobre la seguridad de las vacunas y la disminución en las tasas de inmunización han contribuido al rebrote de enfermedades prevenibles.

Profesionales de la salud insisten
Profesionales de la salud insisten en la inmunización como la mejor estrategia para detener la expansión del virus. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Un llamado a reforzar la prevención y la respuesta sanitaria

Las autoridades de salud han reiterado su llamado a la población para que tome medidas de precaución y se asegure de que sus hijos estén al día con el esquema de vacunación. Además, han recomendado a las personas que puedan haber estado expuestas a casos de sarampión que estén atentas a los síntomas y busquen atención médica si presentan fiebre o erupción cutánea.

Los hospitales y clínicas en Texas y Nuevo México continúan trabajando para contener el brote y evitar nuevas exposiciones. Sin embargo, la rápida propagación del virus ha puesto a prueba los sistemas de salud locales y ha resaltado la necesidad de mantener altas tasas de vacunación para evitar futuros brotes. “No podemos permitirnos bajar la guardia”, advirtió Wells.

El caso de los recién nacidos expuestos en Lubbock es un recordatorio de los riesgos que el sarampión representa para los más vulnerables. Mientras los médicos y enfermeros siguen administrando inmunoglobulina a los bebés afectados, la comunidad médica insiste en que la única manera de erradicar el virus es con la vacunación generalizada.