Los dueños de perros podrían estar malinterpretando las emociones de sus mascotas, según científicos estadounidenses

Esta tendencia podría generar malentendidos sobre el bienestar emocional de los perros, lo que subraya la necesidad de prestar más atención a las señales corporales de los animales

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Los resultados reflejan un posible
Los resultados reflejan un posible sesgo humano al interpretar emociones caninas según su contexto inmediato. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Un reciente estudio publicado en la revista Anthrozoös ha puesto en evidencia un fenómeno que podría estar afectando la relación entre los humanos y sus perros: las personas tienden a interpretar las emociones de sus mascotas basándose más en el contexto que en el comportamiento real del animal.

Según informó The New York Times, esta tendencia podría generar malentendidos sobre el bienestar emocional de los perros, lo que subraya la necesidad de prestar más atención a las señales corporales de los animales.

La investigación, liderada por Holly Molinaro, estudiante de doctorado en la Universidad Estatal de Arizona, utilizó videos de un perro llamado Oliver, un pointer-beagle de 14 años, para analizar cómo las personas perciben las emociones caninas. En los experimentos, los participantes observaron clips en los que Oliver reaccionaba a estímulos positivos y negativos, como un juguete, una correa, un aspirador o una reprimenda.

Sin embargo, los resultados mostraron que los observadores se dejaban influir más por el contexto que por las expresiones del perro, incluso cuando los videos habían sido editados para ser deliberadamente engañosos.

Participantes reaccionaron a estímulos positivos
Participantes reaccionaron a estímulos positivos y negativos del perro, como correas, aspiradores y juguetes. (Imagen Ilustrativa Infobae)

El contexto en la percepción emocional

De acuerdo con los hallazgos, los participantes calificaron las emociones de Oliver como más positivas cuando el contexto parecía favorable, independientemente de las señales reales del perro. Por ejemplo, en un video se mostraba a Oliver reaccionando a un aspirador, pero el contexto sugería que estaba viendo su correa. Los observadores interpretaron su estado emocional como positivo, ignorando las señales de incomodidad que el perro realmente exhibía.

“Cuando se trata de percibir las emociones de los perros, creemos que sabemos lo que está ocurriendo, pero en realidad estamos confiando inconscientemente en muchos otros factores”, explicó Molinaro al medio estadounidense. Este sesgo, según la investigadora, podría llevar a los dueños a malinterpretar las necesidades y emociones de sus mascotas, afectando su bienestar.

La idea para este experimento surgió en 2021, durante las restricciones impuestas por la pandemia de Covid-19, que limitaron las posibilidades de realizar investigaciones presenciales. Inspirada por herramientas como Zoom, que permiten desenfocar los fondos en videollamadas, Molinaro decidió aplicar un enfoque similar para eliminar el contexto en los videos de Oliver.

Clive Wynne señaló que los
Clive Wynne señaló que los humanos tienden a centrarse más en el ambiente que en las expresiones del animal. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Durante una visita a la casa de sus padres en Connecticut, la investigadora grabó a su padre interactuando con Oliver en diferentes situaciones. Posteriormente, editó los videos para crear versiones en las que el perro aparecía sobre un fondo negro, eliminando cualquier pista contextual.

Los resultados fueron reveladores: cuando los participantes evaluaron los videos sin contexto, calificaron las emociones de Oliver como igualmente positivas en situaciones tanto favorables como desfavorables.

Además, los investigadores llevaron el experimento un paso más allá al combinar imágenes de diferentes situaciones. Por ejemplo, mostraron a una persona sosteniendo un objeto positivo, como una correa, junto con imágenes de Oliver reaccionando a algo negativo, como un aspirador. Los participantes, nuevamente, se dejaron influir por el contexto y no por las señales reales del perro.

Un “punto ciego” en la percepción humana

El profesor Clive Wynne, experto en comportamiento canino y asesor de la investigación, destacó que los resultados reflejan un “gran punto ciego” en la capacidad de las personas para interpretar las emociones de los perros. Según explicó a The New York Times, los humanos parecen centrarse más en lo que ocurre a su alrededor que en las señales específicas del animal.

Los humanos parecen centrarse más
Los humanos parecen centrarse más en lo que ocurre a su alrededor que en las señales específicas del animal. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Aunque el estudio tiene limitaciones, como el hecho de que se basó en las reacciones de un solo perro, los investigadores creen que los resultados son un llamado de atención para los dueños de mascotas.

Wynne señaló que las personas podrían ser más precisas al evaluar las emociones de sus propios perros, especialmente en casos de miedo extremo o trauma, pero enfatizó la importancia de aprender a interpretar las señales corporales de los animales

Molinaro sugirió que los dueños que deseen comprender mejor a sus perros deberían tomarse unos segundos para observar directamente al animal, en lugar de dejarse llevar por el contexto. “Es importante centrarse en el perro y no en todo lo demás que está ocurriendo”, afirmó.

Por su parte, Wynne compartió que los hallazgos del estudio lo han llevado a reflexionar sobre su propia relación con su mascota, una galga retirada de las carreras. “Estoy trabajando en aprender cómo se expresa”, comentó. “Si entiendo qué la hace feliz o infeliz, puedo guiar su vida hacia una mayor felicidad”.

Lamentablemente, Oliver no vivió lo suficiente para ver los resultados de este estudio publicados. Sin embargo, Molinaro expresó que es reconfortante saber que su perro ha sido inmortalizado a través de esta investigación, que podría ayudar a mejorar la relación entre los humanos y sus compañeros caninos.