Un incidente inusual en el puerto de Ventura, California, involucró a un Tesla Cybertruck que quedó sumergido en el agua tras un error del conductor. El vehículo eléctrico de la compañía de Elon Musk cayó al puerto el lunes por la mañana, lo que desencadenó una operación de rescate que incluyó a varias agencias locales y estatales.
La prioridad del equipo de rescate fue recuperar el automóvil sin comprometer la seguridad, debido al riesgo de incendio asociado con las baterías de iones de litio, según informó el periódico Los Angeles Times.
Carson Shevitz, capitán de TowBoatUS Ventura, dijo en entrevista para el medio que el conductor del Cybertruck explicó que el accidente ocurrió mientras intentaba lanzar una moto acuática desde la rampa de embarque.
El desafío de rescatar un vehículo sumergido

En lugar de avanzar, el vehículo fue puesto en reversa, lo que provocó que se deslizara hacia el agua y quedara sumergido a una profundidad de 2.4 metros. Shevitz, quien lideró la operación de rescate, detalló que el incidente ocurrió poco antes de las 11:00 horas, cuando agentes de la Patrulla Portuaria del Distrito de Ventura avistaron el vehículo flotando cerca de la rampa.
El rescate del Cybertruck presentó desafíos únicos debido a los riesgos asociados con las baterías de iones de litio, que pueden incendiarse y liberar gases tóxicos si resultan dañadas. Shevitz explicó que, al enterarse de que se trataba de un vehículo eléctrico, su principal preocupación fue la posibilidad de un siniestro relacionado con el fuego. “No fue un ‘genial’, fue un ‘genial’, porque hay muchas cosas desconocidas que tenemos que resolver”, comentó.
Para llevar a cabo la operación, el capitán se sumergió personalmente y aseguró el vehículo a una grúa que lo arrastró hasta la orilla. La misión fue cuidadosamente planificada en colaboración con ingenieros de Tesla y el Departamento de Bomberos de la Ciudad de Ventura, quienes ofrecieron orientación para minimizar los riesgos, según explicó en su entrevista con el medio.
No se detectaron señales de burbujas ni silbidos provenientes del vehículo, indicadores que podrían haber sugerido una liberación de gas por parte de las baterías, lo que ayudó a confirmar que la camioneta estaba en condiciones de ser transportado de vuelta a su centro de servicio de manera segura.
Las baterías de iones de litio, como las utilizadas en el Cybertruck, representan un peligro significativo cuando se exponen al agua salada. Según explicó Shevitz, este tipo de baterías puede fallar y, en casos extremos, incendiarse, liberando gases tóxicos como fluoruro de hidrógeno y monóxido de carbono.
Una vez que estas baterías se encienden, no pueden ser apagadas con agua y deben ser trasladadas a un área segura para que liberen el gas de manera controlada.
Una complicada operación de rescate coordinada entre múltiples agencias

Especialistas de Tesla desempeñaron un papel clave en garantizar la seguridad durante la recuperación del vehículo. Según Shevitz, la compañía recomendó establecer un perímetro de 13 metros alrededor del Cybertruck una vez que fuera retirado del agua.
Además, ingenieros de campo de la compañía de Musk acudieron al lugar para inspeccionar el vehículo y confirmar que estaba en condiciones seguras para ser transportado a un centro de servicio.
El rescate completo tomó menos de dos horas y contó con la participación de múltiples agencias, incluyendo la Patrulla Portuaria de Ventura, la Guardia Costera de Estados Unidos y el Departamento de Pesca y Vida Silvestre de California. Shevitz señaló durante su diálogo con el LA Times que la operación atrajo la atención de numerosos curiosos, quienes se acercaron para observar el inusual evento.
El capitán de TowBoatUS Ventura explicó que su equipo responde frecuentemente a llamadas para rescatar embarcaciones dañadas, sin embargo, las operaciones de recuperación de vehículos son más extrañas.
Este automóvil sumergido se convirtió en el tercer vehículo y el primer Cybertruck que Shevitz y su equipo ayudan a recuperar en los últimos 12 meses.