
Las autoridades federales de inmigración arrestaron a un activista palestino el sábado que desempeñó un papel destacado en las protestas contra Israel en la Universidad de Columbia, una escalada significativa en la promesa del gobierno de Trump de detener y deportar a activistas estudiantiles .
Mahmoud Khalil, un estudiante de posgrado en Columbia hasta diciembre pasado, se encontraba en su residencia propiedad de la universidad el sábado por la noche, cuando varios agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) ingresaron al edificio y lo detuvieron, informó su abogada Amy Greer a The Associated Press.
Greer relató que habló por teléfono con uno de los agentes de ICE durante el arresto, quien le comentó que estaban actuando bajo órdenes del Departamento de Estado para revocar la visa de estudiante de Khalil. Informado por la abogada de que Khalil estaba en Estados Unidos con una tarjeta de residencia permanente, el agente afirmó que también estaban revocando eso, según la abogada.
Una portavoz del Departamento de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, confirmó el arresto de Khalil en un comunicado el domingo, describiéndolo como “en apoyo a las órdenes ejecutivas del presidente Trump que prohíben el antisemitismo”.
El arresto de Khalil es el primer esfuerzo de deportación conocido públicamente bajo la prometida represión de Trump contra los estudiantes que se unieron a las protestas contra la guerra en Gaza que se extendieron por los campus universitarios la primavera pasada. El gobierno ha afirmado que los participantes renunciaron a sus derechos de permanecer en el país al apoyar a Hamas.
McLaughlin señaló que el arresto estaba directamente relacionado con el papel de Khalil en las protestas, alegando que “lideró actividades alineadas con Hamas, una organización terrorista designada”.
Cuando los agentes de ICE llegaron al edificio del campus el sábado, también amenazaron con arrestar a la esposa de Khalil, una ciudadana estadounidense que está embarazada de ocho meses, indicó Greer.
Inicialmente se les informó que había sido trasladado a un centro de detención de inmigrantes en Elizabeth, Nueva Jersey. Pero cuando su esposa intentó visitarlo el domingo, se enteró de que no estaba allí. Greer dijo que aún no sabía el paradero de Khalil hasta el domingo por la noche.
“No hemos podido obtener más detalles sobre por qué está siendo detenido”, declaró Greer a The Associated Press. “Esto es una clara escalada. El gobierno está cumpliendo con sus amenazas”.

Un portavoz de Columbia detalló que los agentes deben presentar una orden antes de ingresar a la propiedad de la universidad, pero se negó a decir si la escuela había recibido una antes del arresto de Khalil. El portavoz también se negó a comentar sobre la detención de Khalil.
En un mensaje compartido en X el domingo por la noche, el secretario de Estado Marco Rubio dijo que el gobierno “revocará las visas y/o tarjetas de residencia permanente de los simpatizantes de Hamas en Estados Unidos para que puedan ser deportados”.
El Departamento de Seguridad Nacional puede iniciar procedimientos de deportación contra los titulares de tarjetas de residencia permanente por un amplia gama de actividades delictivas alegadas, incluyendo el apoyo a un grupo terrorista. Pero la detención de un residente permanente legal que no ha sido acusado de un delito marcó un movimiento extraordinario con una base legal incierta, según expertos en inmigración.
“Esto tiene la apariencia de una medida de represalia contra alguien que expresó una opinión que al gobierno de Trump no le gustó”, lamentó Camille Mackler, fundadora de Immigrant ARC, una coalición de proveedores de servicios legales en Nueva York.
Khalil, quien recibió su maestría de la Facultad de Asuntos Internacionales de Columbia el semestre pasado, actuó como negociador para los estudiantes cuando trataban con las autoridades de la universidad sobre el fin del campamento de tiendas erigido en el campus la primavera pasada, un papel que lo convirtió en uno de los activistas más visibles en apoyo al movimiento, lo que provocó llamados de activistas pro-Israel en las últimas semanas para que el gobierno de Trump comenzara procedimientos de deportación en su contra.

Khalil fue uno de los investigados por una nueva oficina de la Universidad de Columbia que ha presentado cargos disciplinarios contra docenas de estudiantes que han expresado críticas hacia Israel, de acuerdo con registros compartidos con la AP.
Esas pesquisas se producen al tiempo que el gobierno de Trump ha cumplido con su amenaza de recortar cientos de millones de dólares en financiamiento a Columbia debido a lo que el gobierno describe como el fracaso de la escuela de la Ivy League para sofocar el antisemitismo en el campus.
La acusación de la universidad contra Khalil se centró en su participación en el grupo Columbia University Apartheid Divest, alegando que había ayudado a organizar un “evento de marcha no autorizado” en que los participantes glorificaron el ataque de Hamas del 7 de octubre de 2023 y desempeñó un “papel sustancial” en la circulación de publicaciones en redes sociales que criticaban el sionismo, entre otros actos de presunta discriminación.
“Tengo alrededor de 13 acusaciones en mi contra, la mayoría son publicaciones en redes sociales con las que no tuve nada que ver”, expresó Khalil a la AP la semana pasada.
“Sólo quieren mostrarle al Congreso y a los políticos de derecha que están haciendo algo, sin importar las consecuencias para los estudiantes”, agregó. “Principalmente es una oficina para silenciar el discurso pro-Palestina”.
(Con información de AP)