
Un juez federal ha rechazado la solicitud de Denver Public Schools para detener las redadas de agentes de inmigración en escuelas, una medida que buscaba proteger a los estudiantes y sus familias de posibles detenciones en estos espacios considerados sensibles. Esta decisión representa un respaldo a la política de la administración de Donald Trump, que busca intensificar los esfuerzos de deportación en todo el país.
El fallo fue emitido por el juez del Distrito de los Estados Unidos, Daniel Domenico, quien determinó que el distrito escolar no logró demostrar que la disminución en la asistencia de estudiantes estuviera directamente relacionada con la decisión del gobierno federal de revertir una política de la administración del expresidente Joe Biden.
Esta medida, implementada durante el gobierno de Biden protegía lugares sensibles como escuelas e iglesias de redadas por parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Según reportó The Associated Press (AP), no estaba claro qué tanto del temor respecto a las posibles redadas en las escuelas se debió a las nuevas reglas, tomando como punto de comparación las preocupaciones más amplias de un aumento de las acciones de inmigración.
El impacto en las escuelas y la respuesta del distrito

El distrito escolar de Denver presentó una demanda federal contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y su secretaria, Kristi Noem, argumentando que la reversión de la política de 2021 había afectado su capacidad para cumplir con su misión educativa, tal y como reportó Fox News.
El distrito alegó que muchos estudiantes dejaron de asistir a clases debido al temor generado por las redadas en las escuelas, lo que, según ellos, obstaculizó su labor de garantizar el acceso a la educación.
En su demanda, el distrito también solicitó una orden judicial preliminar que prohibiera al gobierno federal realizar arrestos en lugares sensibles como las escuelas. Sin embargo, esta petición fue denegada por el juez Domenico, quien también rechazó una solicitud para imponer una orden judicial a nivel nacional que obligara a las autoridades de inmigración a volver a las directrices de 2021.
La decisión de permitir redadas en escuelas y otros lugares sensibles forma parte de un esfuerzo más amplio de la administración de Trump para reforzar las políticas de inmigración y aumentar las deportaciones.
El debate sobre los lugares sensibles y las políticas de inmigración

Según información de AP, las Escuelas Públicas de Denver alegaron que tuvieron que desviar recursos para responder al temor entre los estudiantes y sus familias.
“Esto incluye brindar apoyo de salud mental a los estudiantes, desviar la atención de los administradores de los asuntos académicos a los asuntos de inmigración y ayudar a los estudiantes que faltan a la escuela a ponerse al día”, explicaron los abogados del distrito escolar en la solicitud para bloquear la nueva política, según declaraciones recogidas por la agencia de noticias.
La política de 2021, implementada bajo la administración de Joe Biden, establecía que lugares como escuelas, iglesias y hospitales debían ser considerados zonas seguras, libres de redadas de inmigración.
Generalmente, los agentes migratorios debían obtener aprobación para realizar operaciones en estos lugares, sin embargo, se permitían excepciones por cuestiones como la seguridad nacional.
Hasta una semana antes del fallo del juez Domenico, arrestos nuevos en escuelas no se habían producido como fruto de la nueva política, reveló AP.