
Un incidente poco común sacudió el Tiger Creek Preserve, ubicado en el condado de Polk, Florida, cuando una mujer fue atacada por un caimán mientras navegaba en kayak. Según informó la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC), el ataque ocurrió el pasado lunes 3 de marzo y dejó a la víctima con una mordedura en el codo. La mujer fue trasladada de inmediato a un hospital local para recibir tratamiento, aunque las autoridades no han revelado detalles sobre la gravedad de sus lesiones.
De acuerdo con la FWC, un cazador especializado en caimanes fue enviado al lugar para localizar y capturar al animal involucrado en el ataque. A pesar del incidente, otros navegantes fueron vistos en el agua poco después, lo que subraya la rareza de este tipo de eventos en la región. El refugio natural, situado a unos 105 kilómetros al sur de Orlando, es conocido por su biodiversidad y la presencia de caimanes, una especie emblemática de Florida.
El ataque ha generado preguntas sobre el comportamiento del caimán, ya que, según explicó el experto en caimanes Brandon Fisher a FOX 13 Tampa Bay, estos animales suelen evitar a los navegantes. Fisher sugirió que el caimán pudo haberse sentido amenazado, especialmente porque el incidente ocurrió durante la temporada de apareamiento, un período en el que los caimanes pueden volverse más territoriales y defensivos.

“Si estás en un kayak, canoa o bote, debes estar atento a tu entorno y evitar acercarte a estos animales”, advirtió Fisher. “Son depredadores ápice y se defenderán si se sienten en peligro. Es Florida, sabemos que hay caimanes, y esto puede suceder en algún momento. Lamentablemente, los accidentes ocurren, y nunca queremos que esto pase para ninguna de las partes”.
La agencia también recordó a los ciudadanos que pueden reportar caimanes que consideren peligrosos a través de la línea gratuita de la FWC, el Nuisance Alligator Hotline.
Recomendaciones para prevenir ataques
La FWC destacó que los ataques graves de caimanes son poco frecuentes en Florida, pero recordó a los residentes y visitantes la importancia de tomar precauciones para minimizar los riesgos. Entre las recomendaciones principales, la agencia sugiere mantener una distancia segura si se avista un caimán y evitar nadar fuera de las áreas designadas, especialmente durante las horas de mayor actividad de estos animales, que suelen ser entre el anochecer y el amanecer.

Además, la FWC enfatizó la importancia de mantener a las mascotas con correa y alejadas de las orillas de los cuerpos de agua, ya que los caimanes pueden confundirlas con presas naturales. También recordó que alimentar a los caimanes está prohibido por ley, ya que esto puede alterar su comportamiento natural y hacer que asocien a los humanos con comida, aumentando el riesgo de incidentes.
Florida alberga una de las poblaciones de caimanes más grandes del mundo, con más de un millón de ejemplares distribuidos en lagos, ríos y humedales, según ABC News. Este reptil puede alcanzar hasta 4,5 metros de longitud y pesar más de 450 kilogramos. Su población se ha recuperado significativamente desde que estuvo en peligro de extinción en la década de 1960, gracias a estrictas regulaciones de conservación y programas de manejo de vida silvestre.
En Florida, los caimanes desempeñan un papel ecológico clave al regular poblaciones de otras especies y contribuir al equilibrio de los ecosistemas acuáticos. Son depredadores oportunistas que se alimentan de peces, aves y pequeños mamíferos. Su presencia en áreas urbanizadas ha generado encuentros con humanos, lo que ha llevado a la implementación de medidas para minimizar conflictos, como campañas de concienciación y programas de captura y reubicación cuando representan un riesgo.