Nueva York busca recuperar USD 50 millones invertidos en dispensarios de cannabis que no lograron abrir

El proyecto impulsado por el gobierno buscaba establecer comercios regulados en distintas localidades, pero múltiples obstáculos administrativos, financieros y regulatorios han impedido su ejecución conforme a lo previsto

Guardar
El estado de Nueva York
El estado de Nueva York busca recuperar una inversión de 50 millones de dólares en dispensarios legales de cannabis. (Imagen ilustrativa Infobae)

El estado de Nueva York intenta recuperar parte de los recursos invertidos en el programa de dispensarios de cannabis, en medio de críticas sobre su ejecución y disputas entre comerciantes por la regulación del sector. La administración de la gobernadora Kathy Hochul enfrenta cuestionamientos sobre el uso de los ingresos fiscales generados por la venta legal de marihuana y su impacto en las comunidades afectadas por la criminalización del consumo de cannabis.

El programa Cannabis Social Equity Investment Fund, aprobado en 2022, tenía como objetivo apoyar a empresarios con antecedentes por delitos relacionados con el cannabis, facilitando la apertura de dispensarios legales. Sin embargo, de los 150 establecimientos planificados, solo 22 han logrado iniciar operaciones. La situación ha generado preocupación entre legisladores y activistas, quienes argumentan que el estado no ha cumplido con los compromisos de equidad y reinversión social derivados de la legalización.

Además de los problemas financieros, la industria del cannabis en Nueva York enfrenta conflictos relacionados con la regulación de la ubicación de dispensarios y la proliferación de comercios ilegales. Algunas empresas han iniciado acciones legales para exigir el cumplimiento de las normas estatales, mientras que otros sectores abogan por una mayor flexibilidad en la distribución de las tiendas autorizadas.

El conflicto por la recuperación de fondos estatales

El estado de Nueva York busca recuperar una inversión de 50 millones de dólares destinada a la creación de dispensarios de cannabis, en medio de un conflicto sobre el financiamiento de la industria y el impacto en comunidades afectadas por la penalización del consumo de marihuana. El programa Cannabis Social Equity Investment Fund, aprobado en 2022 con el objetivo de apoyar a empresarios con antecedentes por delitos relacionados con cannabis, ha registrado menos aperturas de las esperadas y ha generado críticas sobre su ejecución, según informó The New York Times.

La iniciativa, promovida por la gobernadora Kathy Hochul, preveía la creación de 150 dispensarios, pero hasta la fecha solo 22 han iniciado operaciones. La administración estatal argumenta que el financiamiento inicial provino de fondos públicos, con la condición de que sería reembolsado una vez que los ingresos fiscales por la venta de cannabis fueran suficientes. Sin embargo, activistas y legisladores han cuestionado el plan de recuperación de fondos, afirmando que afecta la inversión en programas de reinserción y desarrollo comunitario, reportó The New York Times.

Solo 22 de los 150
Solo 22 de los 150 dispensarios planeados con el fondo Cannabis Social Equity han iniciado operaciones. (REUTERS/David Dee Delgado)

Críticas a la distribución de los ingresos del cannabis

Joseph W. Belluck, abogado y miembro del panel estatal que administra los ingresos del cannabis, afirmó que la decisión de reembolsar los fondos en este momento perjudica a las comunidades afectadas por la criminalización del consumo de marihuana. Belluck señaló que los fondos de reinversión esperados para 2025 se mantendrán en 5 millones de dólares, sin un incremento, a pesar del aumento en los ingresos fiscales provenientes de la venta de cannabis, según The New York Times.

La Oficina de Gestión del Cannabis (OCM, por sus siglas en inglés), encargada de supervisar la industria en Nueva York, enfrenta un retraso en la revisión de más de 5.000 solicitudes de licencia, según The New York Times. La falta de infraestructura adecuada para procesar estas solicitudes ha generado demoras en la apertura de nuevos dispensarios, lo que a su vez ha ralentizado la recaudación de impuestos destinados a financiar programas sociales vinculados a la legalización del cannabis.

El mercado del cannabis en Nueva York fue diseñado para priorizar a los pequeños empresarios y a aquellos con antecedentes penales por delitos de marihuana. Sin embargo, la falta de financiamiento adecuado y los retrasos en la entrega de licencias han dificultado la viabilidad de muchas de estas empresas. De acuerdo con un informe de la OCM, el 40% de los solicitantes que recibieron licencias aún no han podido abrir sus negocios debido a problemas financieros y regulatorios.

Comercios ilegales, que superan los
Comercios ilegales, que superan los 2.000 locales, compiten con dispensarios autorizados en Nueva York. (Imagen ilustrativa Infobae)

Disputa por la regulación de la ubicación de dispensarios

El retraso en la implementación del mercado legal de cannabis en Nueva York ha llevado a disputas entre propietarios de dispensarios sobre las normas de proximidad entre tiendas autorizadas. Fox 5 NY informó que Chelsea Cannabis Co. ha demandado a la Oficina de Gestión del Cannabis por permitir la apertura de otro dispensario, New Amsterdam Cannabis Dispensary, a solo 213 metros de distancia, cuando la regulación exige un mínimo de 305 metros de separación.

Dan Morena, fundador de Chelsea Cannabis Co., argumentó que la falta de aplicación estricta de las normas estatales perjudica a los empresarios que planificaron sus inversiones bajo la presunción de protección frente a la competencia cercana. Por otro lado, Tom Hayden, gerente general de New Amsterdam Cannabis Dispensary, declaró a Fox 5 NY que la competencia es beneficiosa para los consumidores y que el mercado debe regularse según la demanda.

Según datos del Departamento de Impuestos y Finanzas de Nueva York, el número de dispensarios ilegales en la ciudad ha crecido significativamente, superando los 2.000 locales. La proliferación de estos establecimientos ha generado dificultades para los negocios regulados, que deben cumplir con estrictas normativas y costos operativos más elevados.

Legisladores locales proponen zonas de
Legisladores locales proponen zonas de amortiguamiento entre dispensarios legales y municipios que prohibieron el cannabis. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Tensiones con municipios que han prohibido el cannabis

El conflicto en torno a la regulación del cannabis también se ha extendido a otras áreas del estado. Según Fox 5 NY, funcionarios de los municipios de Hempstead y North Hempstead han expresado su oposición a la ubicación de dispensarios legales cerca de sus límites, argumentando que las ventas de cannabis han sido prohibidas en sus jurisdicciones. Legisladores locales están impulsando la creación de una zona de amortiguamiento de un cuarto de milla entre los dispensarios legales y los municipios que optaron por excluir el comercio de marihuana.

Según la Asociación de Gobiernos del Estado de Nueva York, más de 400 municipios han optado por excluir la venta legal de cannabis en sus territorios, lo que ha generado una fragmentación en el mercado y ha llevado a consumidores a recurrir a comercios ilegales en busca de productos más accesibles.

Comunidades afectadas por la criminalización
Comunidades afectadas por la criminalización del cannabis cuestionan el uso de fondos públicos para reembolsar inversiones. (Imagen ilustrativa Infobae)

Crecimiento irregular del mercado legal de cannabis

El mercado de cannabis en Nueva York ha experimentado un crecimiento desigual, con retrasos en la entrega de licencias y una proliferación de comercios ilegales que operan sin regulación. Las autoridades han intensificado los operativos contra estas tiendas, pero algunos jueces han emitido fallos que obstaculizan el cierre de establecimientos sin licencia, reportó Fox 5 NY.

De acuerdo con un informe del Instituto Rockefeller de Gobierno, Nueva York ha enfrentado mayores dificultades en la implementación de su mercado legal de cannabis en comparación con otros estados como California o Colorado. Las trabas burocráticas, los altos costos de operación y la presencia de un mercado ilícito bien establecido han sido los principales obstáculos para el éxito del sector.