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Las lluvias torrenciales y tormentas invernales que azotan el sur y centro de Estados Unidos han dejado un saldo de al menos nueve personas muertas, con Kentucky como el estado más afectado. Ocho de las víctimas fallecieron en esta región debido a inundaciones repentinas, según informó el gobernador Andy Beshear en una conferencia de prensa el domingo. Las tormentas han generado cortes masivos de electricidad, cierres de carreteras y evacuaciones en varios estados.
Las lluvias intensas provocaron el desbordamiento de ríos y arroyos en Kentucky, lo que llevó al rescate de cientos de personas atrapadas en sus hogares y vehículos, informó AP. La mayoría de las víctimas fallecieron al quedar atrapadas en autos arrastrados por la corriente, incluyendo una madre y su hijo de siete años, quienes fueron encontrados sin vida en el condado de Hart, detalló el forense Tony Roberts.
El gobernador Andy Beshear instó a los ciudadanos a evitar conducir por carreteras inundadas, advirtiendo que el agua puede subir rápidamente y poner en peligro a los conductores. “Este es el momento de búsqueda y rescate, y estoy muy orgulloso de todos los kentuckianos que están respondiendo, arriesgando sus vidas para salvar a otros”, declaró Beshear en un comunicado recogido por The New York Times. Las autoridades locales informaron que las tormentas dejaron al menos 39,000 hogares sin electricidad, aunque se teme que este número aumente debido a los fuertes vientos que persisten en la región.
Tormentas invernales en el este del país
Las condiciones meteorológicas extremas no solo han traído lluvias, sino también tormentas de nieve y temperaturas gélidas en diversas regiones del país. En Nueva Inglaterra y el norte del estado de Nueva York, se prevé una combinación de fuertes nevadas, lluvia helada y vientos de hasta 97 km/h, advirtió el Servicio Meteorológico Nacional.
Más de 185,000 personas en Georgia y 109,000 en Alabama quedaron sin electricidad el domingo debido a los fuertes vientos y tormentas eléctricas, según datos de Power Outage U.S. En Atlanta, Georgia, una persona murió después de que un árbol de gran tamaño cayera sobre una vivienda durante una tormenta en la madrugada del domingo, confirmó el capitán Scott Powell, del Departamento de Bomberos de Atlanta, en declaraciones a The New York Times.

En Tennessee, el Servicio Meteorológico Nacional emitió una emergencia por inundaciones repentinas en la comunidad de Rives, en el noroeste del estado, después de que un dique colapsara el domingo. La alerta, reportada por The New York Times, instó a los residentes a buscar refugio inmediato en terrenos elevados debido al rápido aumento del nivel del agua.
Frío extremo en el norte: temperaturas de hasta -45 °C
Mientras el sur enfrenta lluvias e inundaciones, los estados del norte del país están siendo afectados por una ola de frío extremo. Se espera que en las Dakotas y Minnesota, la sensación térmica alcance los -45 °C debido a una masa de aire ártico impulsada por el décimo vórtice polar de la temporada, informó AP.
En Denver, Colorado, donde las temperaturas bajaron hasta los -10 °C durante el fin de semana, las autoridades habilitaron refugios de emergencia para personas sin hogar. Nueva Inglaterra, Michigan, Iowa y Wisconsin también enfrentan nevadas y fuertes ráfagas de viento, lo que ha complicado el tráfico en carreteras y aeropuertos.
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió que las tormentas seguirán avanzando hacia la costa este, con posibilidad de tormentas eléctricas, tornados y nevadas en los próximos días. “Las ráfagas de viento más intensas, de entre 80 y 97 km/h, afectarán desde Florida hasta Georgia, lo que podría provocar la caída de árboles y daños estructurales”, explicó el meteorólogo Bob Oravec, citado por The New York Times.
Los residentes de las zonas afectadas han sido instados a permanecer en sus hogares y evitar el uso de carreteras inundadas o bloqueadas. Las autoridades siguen monitoreando la situación, mientras los equipos de emergencia continúan con los rescates y la asistencia a las comunidades afectadas.