La Oficina de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) ha comenzado a liberar a algunos migrantes detenidos debido a que la capacidad de su sistema de detención ha superado el límite establecido, según datos internos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) obtenidos por CBS News. Hasta la mañana del martes, la ocupación en los centros de detención de ICE alcanzaba el 109%, con cerca de 42,000 personas bajo custodia a pesar de contar con una capacidad oficial de 38,521 camas en prisiones privadas y cárceles locales.
De acuerdo con CBS News, más de la mitad de los detenidos por ICE fueron arrestados inicialmente en la frontera sur. Solo el lunes, la agencia liberó aproximadamente a 160 migrantes, medida que se atribuye a la falta de espacio y a las restricciones operacionales y legales que han afectado a administraciones tanto republicanas como demócratas. Los migrantes liberados pueden ser sometidos a monitoreo electrónico mediante dispositivos de tobillo.
ICE indicó en un comunicado enviado a CBS News que el incremento de las operaciones de detención ha resultado en un mayor número de arrestos de “extranjeros criminales”, lo que ha generado una demanda superior de capacidad en los centros de detención. La agencia afirmó que está explorando diversas soluciones, incluyendo la colaboración con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), las autoridades locales y estatales, y la solicitud de fondos adicionales al Congreso. Además, ICE revisa expedientes de detenidos con órdenes finales de deportación para agilizar sus procesos de remoción.
Aumento de detenciones bajo la administración Trump
NBC News informó que la liberación de algunos migrantes arrestados bajo la actual administración de Donald Trump se ha registrado en varias localidades del país. Desde la toma de posesión del mandatario, ICE ha intensificado las redadas en todo el territorio nacional, con hasta 1,000 arrestos en un solo día, una cifra superior al promedio diario de 312 detenciones registrado en 2024 durante el último año de gobierno de Joe Biden.
El gobierno de Trump ha eliminado restricciones impuestas en la administración anterior sobre a quién podía detener ICE, otorgando a la agencia un mandato amplio para arrestar a la mayoría de los inmigrantes en situación irregular, incluyendo aquellos sin antecedentes penales. Sin embargo, el proceso de deportación puede extenderse por semanas o meses debido a la tramitación burocrática y a la falta de cooperación de algunos países de origen. En ciertos casos, jueces de inmigración otorgan alivio legal a los detenidos, lo que impide su expulsión inmediata.
Expansión de centros de detención y nuevas instalaciones
Ante la falta de espacio en los centros de detención existentes, ICE planea expandir significativamente su capacidad. Un memorando gubernamental interno citado por CBS News indicó que la agencia evalúa la apertura de 14 nuevos centros de detención con capacidad para 1,000 personas cada uno, además de cuatro instalaciones de mayor tamaño con hasta 10,000 camas cada una.
Además de la construcción de nuevos centros, el gobierno ha recurrido a otras agencias federales para ampliar la capacidad de detención. El Departamento de Defensa autorizó la utilización de una base de la Fuerza Espacial en Colorado para albergar migrantes detenidos, mientras que el martes, la Base Naval de Guantánamo recibió a su primer grupo de detenidos migratorios tras la orden del presidente de convertir las instalaciones en un centro de detención para inmigrantes.
Colaboración con fuerzas locales y uso de estructuras temporales
Reuters reportó que el pasado fin de semana, Tom Homan, asesor de la administración Trump en políticas migratorias, pidió a alguaciles locales colaborar con ICE para arrestar y retener a inmigrantes en situación irregular. Además, CBS News informó que la administración evalúa la posibilidad de utilizar campamentos de carpas, conocidos como “instalaciones flexibles”, similares a los que la Patrulla Fronteriza ha utilizado para procesar temporalmente a familias y menores migrantes en la frontera sur. Sin embargo, estas estructuras presentan desafíos de seguridad y operación, ya que fueron diseñadas para detenciones de corta duración y carecen de medidas de seguridad comparables a los centros de detención de ICE.
Disminución de cruces irregulares en la frontera sur
Mientras ICE enfrenta problemas de hacinamiento, las instalaciones de la Patrulla Fronteriza tienen espacio disponible. CBS News señaló que hasta el martes en la mañana, CBP tenía bajo custodia a menos de 2,000 migrantes, lo que representa aproximadamente el 9% de su capacidad de detención de 21,000 personas. Esto se debe a la disminución de cruces irregulares en la frontera con México, que se encuentran en su nivel más bajo en cinco años. Datos del DHS obtenidos por CBS News indican que en enero, la Patrulla Fronteriza procesó a cerca de 30,000 personas que ingresaron irregularmente al país, la cifra más baja desde mayo de 2020.