La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, firmó una ley que permite a los médicos ocultar su identidad en recetas de píldoras abortivas, en respuesta a la acusación contra la doctora Margaret Carpenter, quien enfrenta cargos en Luisiana por prescribir este tipo de medicación a una menor de edad. La medida, que entró en vigor de inmediato, busca proteger a profesionales de la salud en Nueva York de posibles sanciones en estados con restricciones al aborto, según informó Associated Press (AP).
La legislación permite que los médicos soliciten que el nombre de su consultorio o centro de salud aparezca en las etiquetas de los medicamentos en lugar de su nombre personal. Según detalló Hochul durante la firma del proyecto de ley, esta medida responde al caso de Carpenter, cuyo nombre fue descubierto por las autoridades de Luisiana porque figuraba en la receta médica de la menor. “Después de hoy, eso ya no sucederá”, afirmó Hochul, citada por AP.
Hochul aseguró que no firmará una solicitud de extradición contra Carpenter y reafirmó que Nueva York seguirá siendo un estado donde los médicos puedan brindar atención reproductiva sin temor a represalias. “La libertad reproductiva siempre será protegida en el estado de Nueva York”, afirmó la gobernadora en un comunicado oficial. Además, anunció que impulsará una nueva ley para garantizar que las farmacias cumplan con la disposición sobre etiquetas en medicamentos, según información publicada por su oficina.
El caso de la doctora Margaret Carpenter
El caso que llevó a esta decisión legislativa involucra a Margaret Carpenter, una médica de Nueva York acusada por un gran jurado en el condado de West Baton Rouge, Luisiana, de recetar píldoras abortivas a una menor sin estar físicamente presente en el estado. La menor sufrió una complicación médica tras ingerir el medicamento y fue trasladada a un hospital, aunque no se especificó la etapa de su embarazo. Según AP, la madre de la menor también fue procesada y se entregó a las autoridades.
El fiscal del distrito en Luisiana, Tony Clayton, afirmó que la orden de arresto contra Carpenter es nacional, lo que significa que la doctora podría ser detenida en cualquier estado con leyes restrictivas sobre el aborto. “Las leyes son claras en Luisiana, y quienes las infrinjan serán responsabilizados”, declaró Clayton, citado por AP.
En Luisiana, el aborto está prohibido casi en su totalidad. Los médicos que lo practiquen, ya sea mediante cirugía o medicamentos, pueden enfrentar hasta 15 años de prisión, multas de 200,000 dólares y la pérdida de su licencia médica, de acuerdo con las leyes estatales vigentes. Carpenter ya había sido demandada en Texas por el fiscal general de ese estado, acusada de enviar píldoras abortivas sin cumplir con las regulaciones locales. Sin embargo, este caso no incluyó cargos penales, según AP.
El aborto con medicamentos en Estados Unidos
El uso de píldoras abortivas se ha convertido en el método más común de interrupción del embarazo en Estados Unidos. Según datos de la Society for Family Planning, desde que la Corte Suprema anuló Roe v. Wade en 2022, los estados han adoptado regulaciones diversas:
- 21 estados han impuesto restricciones más estrictas.
- 13 estados han implementado prohibiciones casi totales.
En contraste, Nueva York ha promovido políticas para proteger a médicos que recetan estos medicamentos, incluyendo una ley escudo aprobada en 2023, que brinda inmunidad legal a profesionales que atienden a pacientes en estados con restricciones mediante telemedicina.