Un caso que ha conmocionado tanto a Estados Unidos como al Reino Unido dio un giro decisivo este viernes, cuando un juez en Londres rechazó el recurso presentado por Kimberlee Singler, una madre estadounidense de 36 años, para evitar su extradición a Colorado. Singler enfrenta graves acusaciones por el asesinato de dos de sus hijos y el intento de homicidio de una tercera hija en diciembre de 2023. Según informó The Washington Post, la decisión del juez John Zani, del Tribunal de Magistrados de Westminster, despeja el camino para que el gobierno británico ordene su retorno a Estados Unidos, aunque aún no se ha determinado la fecha exacta de su traslado.
De acuerdo con The Washington Post, los hechos ocurrieron el 18 de diciembre de 2023 en un apartamento de Colorado Springs, donde Singler se encontraba residiendo temporalmente con su madre en medio de una disputa por la custodia de sus hijos. Las víctimas, Elianna “Ellie” Wentz, de 9 años, y Aden Wentz, de 7 años, fueron hallados sin vida tras haber sido apuñalados y baleados. La hija mayor de Singler, de 11 años, sobrevivió al ataque, pero sufrió heridas graves tras ser apuñalada en el cuello. Además de los cargos de asesinato en primer grado y tentativa de homicidio, Singler enfrenta tres acusaciones de abuso infantil y una de agresión.
En su defensa, Singler ha negado cualquier implicación en los crímenes y ha señalado a su exesposo como el posible responsable, alegando que él habría contratado a un sicario o perpetrado los asesinatos directamente. Sin embargo, la policía descartó esta versión tras confirmar que el hombre se encontraba a unos 130 kilómetros (80 millas) del lugar de los hechos, respaldado por registros de GPS que demostraron su ubicación al momento de los asesinatos.
El argumento de la defensa: derechos humanos y cadena perpetua
Durante el proceso judicial en el Reino Unido, el abogado defensor de Singler, Edward Fitzgerald, argumentó que su extradición violaría las leyes europeas de derechos humanos. Según explicó, si Singler es condenada por asesinato en primer grado en Colorado, enfrentaría una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, lo que, a su juicio, constituye un castigo inhumano al no ofrecer ninguna esperanza de rehabilitación o reintegración a la sociedad.
Fitzgerald también señaló que, aunque existe la posibilidad de que el gobernador de Colorado conmute una sentencia de este tipo, dicha acción sería extremadamente improbable. “Sería un suicidio político para cualquier gobernador”, afirmó el abogado, quien además destacó que, históricamente, las conmutaciones de sentencias en Colorado han sido excepcionales.
Según The Washington Post, la defensa subrayó que, de los casos registrados, solo cinco hombres condenados por asesinato han recibido conmutaciones, y en tres de ellos no se trataba de sentencias de cadena perpetua sin libertad condicional. Los otros dos casos involucraban a jóvenes de entre 18 y 21 años, cuyas edades fueron consideradas un factor atenuante.
La postura de la fiscalía y la decisión del juez
Por su parte, el fiscal Joel Smith argumentó que el juez no debía centrarse en la probabilidad de que Singler obtuviera una conmutación de su sentencia, sino en la existencia de un mecanismo que permitiera esa posibilidad. “La perspectiva de liberación no es su preocupación”, afirmó Smith durante una audiencia en diciembre de 2023.
El juez Zani, al emitir su fallo, concluyó que el sistema judicial de Colorado ofrece una opción para la liberación de reclusos condenados a cadena perpetua, aunque sea remota. “Estoy convencido de que la defensa no ha logrado superar el obstáculo necesario para que prospere su impugnación”, declaró el magistrado, según consignó The Washington Post. Tras el fallo, Fitzgerald anunció su intención de apelar la decisión ante el Tribunal Superior del Reino Unido.
Detalles del caso: contradicciones y testimonios
El relato de Singler sobre los eventos del 18 de diciembre ha sido objeto de escrutinio por parte de las autoridades. Según su versión inicial, un intruso habría ingresado al apartamento a través de una puerta del patio que ella olvidó cerrar, atacándola y dejándola inconsciente. Sin embargo, la policía no encontró huellas en la nieve que rodeaba la entrada, lo que puso en duda su declaración. Además, Singler afirmó que, al recuperar la conciencia, descubrió a sus hijos menores muertos y pasó el día cuidando a su hija herida, a quien proporcionó agua. No fue hasta altas horas de la noche, cuando escuchó el tono de llamada de su teléfono, que contactó a la policía.
Inicialmente, las autoridades trataron a Singler como víctima, pero la situación cambió drásticamente cuando su hija sobreviviente modificó su testimonio. Según el nuevo relato de la niña, su madre les había dado leche mezclada con una sustancia en polvo y los había guiado a una habitación, donde les pidió que cerraran los ojos. Posteriormente, la niña relató que Singler la atacó con un cuchillo mientras le decía que “Dios le estaba ordenando hacerlo” y que su padre “les quitaría a los niños”. La menor también mencionó que su madre tenía un arma de fuego.
La huida y captura de Kimberlee Singler
Tras el cambio en el testimonio de su hija, la policía emitió una orden de arresto contra Singler el 26 de diciembre de 2023. Sin embargo, para ese momento, ella ya había huido del país. Cuatro días después, fue localizada y detenida en el exclusivo barrio de Chelsea, en Londres. Según The Washington Post, la policía de Colorado Springs continúa trabajando en la investigación del caso mientras se desarrolla el proceso de extradición.
En un comunicado, el portavoz de la policía, Ira Cronin, señaló: “Somos conscientes del proceso de extradición en curso respecto a Kimberlee Singler, así como de los derechos legales que aún le asisten en el Reino Unido. Nuestros esfuerzos investigativos continúan, y seguimos comprometidos con llevar este caso a su conclusión”.
Un trasfondo de conflicto familiar
El contexto de los crímenes está marcado por una disputa de custodia entre Singler y su exesposo, quien recientemente había obtenido más tiempo de crianza con los niños. Según The Washington Post, dos días antes de los asesinatos, Singler se negó a entregar a los menores a la hermana de su exmarido, quien había acudido a recogerlos para las festividades navideñas. El 18 de diciembre, un juez emitió una orden para que los niños fueran entregados dos días después, pero los trágicos eventos se desarrollaron antes de que se cumpliera el plazo.
Este caso, que combina elementos de violencia familiar, disputas legales y un complejo proceso de extradición internacional, sigue generando atención tanto en Estados Unidos como en el Reino Unido. La resolución final dependerá de los próximos pasos legales y del desenlace del juicio en Colorado, donde Singler enfrentará las graves acusaciones en su contra.