Tesla presenta un nuevo modelo de auto con un precio aproximado de 60.000 dólares

Tesla ha comenzado a vender en Estados Unidos una versión renovada de su SUV Model Y, con un precio inicial de 59.990 dólares antes de aplicar el crédito fiscal federal de 7.500 dólares para vehículos eléctricos, según CNBC. La compañía anunció que las entregas de este modelo actualizado, conocido como “Juniper”, comenzarán en marzo, según nuevos listados en su sitio web.

El nuevo Model Y introduce cambios en su diseño exterior e interior, además de mejoras tecnológicas que buscan atraer a los consumidores en un mercado con creciente competencia. Con modificaciones en su aerodinámica y la incorporación de funciones avanzadas en su sistema de infoentretenimiento, Tesla busca mantener su liderazgo en el sector de los vehículos eléctricos.

La estrategia de Tesla para actualizar su catálogo responde a la necesidad de mantenerse relevante ante la llegada de nuevos competidores y la evolución de las políticas gubernamentales que podrían afectar la adopción de estos vehículos en Estados Unidos. La empresa espera que esta versión renovada impulse sus ventas tras la caída en entregas registrada en 2024.

El Model Y Juniper presenta un panel frontal rediseñado, nuevas barras de luces delanteras y traseras y un interior que incluye asientos ventilados, segunda fila reclinable y conectividad Wi-Fi más rápida, de acuerdo con información publicada en el sitio web de Tesla. La empresa comenzó a recibir pedidos de esta variante en Canadá y Europa el jueves, tras su lanzamiento en China hace aproximadamente dos semanas, informó Reuters.

El nuevo diseño del Model Y también incorpora mejoras en la eficiencia energética, lo que podría traducirse en una mayor autonomía en comparación con versiones anteriores. Además, el software del vehículo ha sido actualizado para mejorar la experiencia de conducción y navegación, integrando nuevas funcionalidades de asistencia al conductor y optimización del rendimiento, según NBC Miami.

La automotriz liderada por Elon Musk busca revitalizar su negocio principal en un mercado cada vez más competitivo. En 2024, Tesla experimentó su primera caída en entregas anuales, lo que ha generado preocupaciones entre inversores y analistas, de acuerdo con CNBC. La compañía divulgará sus resultados financieros del cuarto trimestre y de fin de año el próximo miércoles, después del cierre de los mercados, según datos de Bloomberg.

Factores como la mayor competencia de fabricantes chinos y el encarecimiento de materiales han afectado la producción de Tesla. En particular, la creciente adopción de vehículos eléctricos de marcas como BYD y Volkswagen ha presionado a Tesla a diferenciarse en precio y tecnología, según The Financial Times.

El más reciente modelo nuevo de Tesla, el Cybertruck, comenzó a entregarse a finales de 2023 y se convirtió en la camioneta eléctrica más vendido en EE.UU., informó NBC Miami. Sin embargo, su impacto en las ventas generales no ha sido suficiente para compensar la desaceleración en las entregas de otros modelos, según cifras reportadas por el Departamento de Transporte de EE.UU.

A pesar del entusiasmo inicial por el Cybertruck, algunos analistas han señalado que las dificultades de producción y el alto precio del modelo podrían limitar su adopción en el mercado masivo. Además, las ventas de camionetas eléctricas han enfrentado desafíos frente a opciones híbridas y modelos de combustión interna, que aún dominan el sector.

La expansión del Model Y renovado llega en un momento de incertidumbre respecto a los incentivos para la compra de vehículos eléctricos en EE.UU. Tras su investidura el lunes, el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva que podría revocar el crédito fiscal federal para la compra de estos vehículos, un incentivo aprobado bajo la administración de Joe Biden como parte de la Ley de Reducción de la Inflación, informó CBS News. Aunque Tesla se ha beneficiado de subsidios gubernamentales en el pasado, la eliminación de estos créditos podría afectar más a sus competidores en el sector, según análisis de The Wall Street Journal.

En este contexto, varios fabricantes de automóviles han expresado su preocupación por la posible reducción de incentivos para la industria eléctrica, argumentando que podría ralentizar la adopción de estos vehículos en EE.UU., mientras países como China y la Unión Europea continúan ofreciendo subsidios para promover la transición energética.

Además de la evolución del mercado, la imagen de Tesla se ha visto afectada por la retórica política de Musk y la antigüedad de su línea de modelos, según un informe de Brand Finance publicado por CNBC. La compañía enfrenta el reto de mantener su posición en el sector de los vehículos eléctricos mientras navega un panorama económico y político cambiante, de acuerdo con Bloomberg.

Algunos inversores han señalado que las recientes controversias en torno a Elon Musk, incluyendo su postura en debates políticos y sus declaraciones sobre regulaciones gubernamentales, podrían afectar la percepción pública de Tesla. Paralelamente, la compañía ha enfrentado críticas por retrasos en la actualización de sus modelos y la falta de innovación en comparación con competidores emergentes.