Los pandas gigantes Bao Li y Qing Bao debutan en el Zoológico Nacional de Washington D.C.

Bao Li y Qing Bao, los pandas gigantes que han generado grandes expectativas, hicieron su primera aparición pública en el Zoológico Nacional del Smithsonian en Washington, D.C., este viernes, después de meses de preparación. Con solo tres años de edad, estos pandas llegaron desde China en octubre de 2024 como parte de un renovado acuerdo entre Estados Unidos y con el país asiático. Esta iniciativa se llevará a cabo durante la próxima década y busca fortalecer los lazos culturales y científicos entre ambas naciones. “Nuestra relación compartida con los pandas profundiza mi convicción de que China y Estados Unidos tienen mucho más en común que lo que nos divide”, declaró Xie Feng, embajador chino en Estados Unidos, según CBS.

El acuerdo de conservación no solo asegura la estancia de estos pandas en Washington, sino que también subraya la importancia de su preservación global. Smithsonian Magazine recogió las palabras de Brandie Smith, directora del Zoológico Nacional, quien destacó: “Los pandas gigantes representan cómo grandes resultados de conservación pueden lograrse a través de grandes asociaciones y del apoyo público”. Según la revista, este acuerdo incluye un pago anual de un 1 millón de dólares, destinado directamente a los programas de conservación de pandas en China.

Los pandas ya son considerados íconos de la capital estadounidense. Según Nexstar, la alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, sostuvo: “Queremos que nuestro mensaje sea claro para los turistas: tenemos hoteles de clase mundial, fantásticos restaurantes y pandas”. Lonnie Bunch, secretario del Smithsonian, reforzó la idea al afirmar: “En cierto modo, [los pandas] son tan icónicos como el Monumento a Washington o el Memorial de Lincoln”, citó Nexstar.

El Zoológico Nacional llevó a cabo una serie de ajustes significativos en el hábitat de los pandas para garantizar su bienestar y comodidad. Entre las mejoras destacadas, Smithsonian Magazine informó que se añadieron sistemas avanzados de climatización, vallas más altas, plataformas exteriores y un sistema innovador de evacuación de humo. Laurie Thompson, curadora asistente de pandas gigantes, señaló: “Queremos que sea un lugar seguro, pero también divertido”.

A pesar del esfuerzo para que el hábitat sea acogedor, los encargados permitieron que los pandas ajustaran su ritmo de adaptación. Según declaraciones recogidas por ese mismo medio, James Steeil, veterinario supervisor del zoológico, explicó que los animales “deciden por sí mismos cuándo están listos para conocer al público”.

La llegada de Bao Li y Qing Bao marca el regreso de pandas a Washington tras más de un año de ausencia. El último trío, compuesto por Mei Xiang, Tian Tian y Xiao Qi Ji, regresó a China en noviembre de 2023 cuando venció el acuerdo previo, indicó CBS. Esta colaboración transnacional comenzó en 1972, cuando China envió a Estados Unidos dos pandas gigantes en el marco del histórico viaje de Richard Nixon al gigante asiático. Desde entonces, iniciativas de “diplomacia panda” han fortalecido el vínculo entre ambas naciones mientras se prioriza la conservación de esta especie.

CBS señaló que esta cooperación científica ha permitido un aumento significativo en la población global de pandas, pasando de menos de 1.000 a casi 3.000 ejemplares en las últimas décadas. Actualmente, los pandas ya no están catalogados como en peligro, sino como vulnerables.

Durante su debut, los cuidadores del zoológico destacaron las características únicas de los nuevos pandas. Según el Smithsonian Magazine, Bao Li, cuyo nombre significa “poder activo y vital”, se muestra juguetón y curioso. Por otro lado, Qing Bao, cuyo nombre puede traducirse como “tesoro verde”, es más independiente y prefiere pasar tiempo en las alturas de los árboles. “Todo es nuevo para él, así que está divirtiéndose mucho”, comentó la cuidadora Mariel Lally en el blog del zoológico, citado por dicha revista.

Para celebrar el regreso de estos entrañables animales a la capital, el zoológico ha lanzado varias actividades especiales, entre ellas un evento por el Año Nuevo Lunar y transmisiones en vivo mediante la renovada Giant Panda Cam, un sistema de cámaras que permite a los fanáticos observar cada movimiento de los pandas desde las 7:00 hasta las 19:00, hora local, indicó CBS.

Los eventos han atraído no solo a visitantes regulares, sino también a figuras relevantes. Nexstar informó que numerosos asistentes a la inauguración mostraron entusiasmo, incluidos jóvenes admiradores que expresaron su deseo de “abrazar a los pandas”.

Aunque Bao Li y Qing Bao aún no están listos para reproducirse, ya que los pandas alcanzan la madurez sexual entre los cuatro y siete años, los expertos mantienen la esperanza de futuras crías que contribuirán a la conservación. Según declaraciones de Lally recogidas por Smithsonian Magazine, a este momento de sus vidas se les puede comparar con “adolescentes torpes”, con varios años de desarrollo por delante antes de estar preparados para aparearse.

En caso de tener crías, los pequeños pandas serán enviados a China antes de cumplir cuatro años, donde integrarán programas de reproducción avanzada. Gracias a colaboraciones como la del Zoológico Nacional del Smithsonian, los avances en conservación siguen beneficiando esta emblemática especie.

La emocionante presentación de Bao Li y Qing Bao representa un nuevo capítulo no solo para el Zoológico Nacional de Washington, sino también para la larga historia de intercambio cultural y conservación que genera un impacto global significativo.