Nueva alerta en California: lluvias intensas elevan el riesgo de deslizamientos tras los incendios devastadores

Ante las precipitaciones que se pronostican para el fin de semana, el gobernador Newsom coordina acciones preventivas con equipos especializados ante lluvias que comprometen la estabilidad del terreno incendiado en Los Ángeles

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El gobernador de California anuncia
El gobernador de California anuncia despliegue de equipos para mitigar riesgos de deslizamientos en el sur del estado por lluvias. (REUTERS/Ringo Chiu)

El gobernador de California, Gavin Newsom, anunció el despliegue de equipos especializados para mitigar los riesgos de deslizamientos de tierra en el sur del estado, una región que se prepara para recibir fuertes lluvias este fin de semana. Según informó ABC News, estas precipitaciones, aunque esperadas en una zona afectada por la sequía, representan una amenaza significativa debido a los daños ocasionados por los recientes incendios en el condado de Los Ángeles.

De acuerdo con el medio, las lluvias, que se prevé que alcancen hasta 25 milímetros durante el fin de semana, podrían generar problemas graves en las áreas afectadas por los incendios Palisades y Eaton, que comenzaron el pasado 7 de enero.

Estas conflagraciones arrasaron comunidades como Pacific Palisades y Altadena, destruyendo vecindarios, cobrando más de dos docenas de vidas y obligando a la evacuación de más de 100.000 personas. Las cicatrices dejadas por los incendios en las laderas de las montañas son especialmente vulnerables a las lluvias, lo que aumenta el riesgo de deslizamientos de tierra y flujos de escombros.

Lluvias previstas para este fin
Lluvias previstas para este fin de semana podrían generar graves deslizamientos en zonas dañadas por incendios recientes. (REUTERS/David Swanson)

Acciones preventivas ante el riesgo de deslizamientos

La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, emitió una orden ejecutiva el martes para reforzar las áreas afectadas antes de la llegada de las lluvias. Según detalló Los Angeles Times, esta medida busca prevenir daños adicionales en las zonas ya devastadas por los incendios y proteger los recursos naturales, como las cuencas hidrográficas, las playas y el océano, de posibles escorrentías tóxicas.

Entre las acciones contempladas en el plan de emergencia se incluyen la instalación de barreras, la remoción de escombros y la redirección del agua de lluvia hacia el sistema de alcantarillado, donde podrá ser tratada. “Este esfuerzo es crucial para evitar que las lluvias agraven aún más la situación en las áreas afectadas”, señaló Bass durante una conferencia de prensa.

Por su parte, el gobernador Newsom informó que más de 400 miembros del California Conservation Corps trabajarán en la protección de las cuencas hidrográficas en las zonas afectadas por los incendios. Estas tareas incluyen la colocación de barreras físicas, como cercas de sedimentos y barreras de paja, para filtrar los contaminantes presentes en el agua de lluvia. Además, más personal será capacitado en los próximos días para aumentar la capacidad de respuesta.

Más de 400 miembros del
Más de 400 miembros del California Conservation Corps trabajan protegiendo cuencas en áreas afectadas por incendios. (REUTERS/Mike Blake)

El despliegue también incluye a más de 80 miembros de la Guardia Nacional de California, quienes utilizarán maquinaria pesada, como excavadoras y camiones de volteo, para retirar más de 400.000 metros cúbicos de materiales acumulados en las cuencas de escombros locales.

Las cicatrices dejadas por los incendios en las laderas de las montañas representan un peligro significativo, ya que estas áreas no absorben el agua de manera normal. Según explicó la concejal de Los Ángeles, Traci Park, durante una conferencia de prensa, “las cicatrices de los incendios no solo están ubicadas cerca del océano, sino también en colinas que ya son propensas a deslizarse”. Park destacó que estas laderas han absorbido grandes cantidades de agua debido a los esfuerzos de extinción de incendios, tuberías rotas y piscinas derretidas, lo que las hace aún más inestables.

“Agregar más agua a estas colinas saturadas y frágiles es lo último que necesitamos”, afirmó Park. Sin embargo, reconoció que las lluvias son inevitables y advirtió que las cicatrices de los incendios aumentan el riesgo de inundaciones, deslizamientos de tierra y flujos de escombros.

Las cicatrices de los incendios
Las cicatrices de los incendios en laderas montañosas complican absorción normal de agua tras lluvias. (REUTERS/Ringo Chiu)

Además, ABC News señaló que las tormentas eléctricas previstas podrían agravar la situación, ya que las lluvias intensas asociadas a estas tormentas podrían generar deslizamientos más graves. También existe el riesgo de que los rayos provoquen nuevos incendios en una región ya devastada.

Los incendios Palisades y Eaton han dejado una huella profunda en las comunidades afectadas. Los fuegos no solo destruyeron hogares y cobraron al menos 27 vidas, sino que también obligaron a miles de personas a abandonar sus hogares. La magnitud de los daños ha sido descrita como sin precedentes en un entorno urbano.

Mientras el sur de California se prepara para las lluvias, las autoridades continúan implementando medidas preventivas para proteger a las comunidades y los recursos naturales. Los esfuerzos incluyen la instalación de barreras, la remoción de escombros y la capacitación de personal adicional para responder a posibles emergencias. Aunque las lluvias representan un alivio para una región afectada por la sequía, también traen consigo nuevos desafíos.

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