Un nuevo proyecto de ley presentado en Florida podría cambiar drásticamente el panorama educativo para los estudiantes indocumentados en el estado. Según informó Fox 35, el senador estatal Randy Fine, republicano por el Distrito 19, ha propuesto una legislación que busca prohibir que ciertas universidades públicas de alta demanda admitan a estudiantes que se encuentren en el país sin autorización legal.
Este proyecto, identificado como SB 244, se centra en instituciones con procesos de admisión competitivos, como la Universidad de Florida, la Universidad Estatal de Florida, la Universidad Central de Florida y la Universidad Internacional de Florida.
De acuerdo con Fine, el objetivo de la medida es priorizar los recursos educativos para ciudadanos estadounidenses y residentes legales. “¿Por qué un inmigrante ilegal debería ocupar un lugar en la Universidad de Florida que podría ser para un floridano o un estadounidense?”, cuestionó el senador en declaraciones recogidas por Fox 35.
El senador argumenta que, incluso si los estudiantes indocumentados pagan la matrícula completa, su presencia podría desplazar a otros aspirantes que cumplen con los requisitos legales.
Un cambio significativo en la política educativa de Florida
El proyecto de ley SB 244 no es el único esfuerzo reciente de Randy Fine para modificar las políticas educativas relacionadas con los estudiantes indocumentados. Según detalló AP, el senador también presentó el mes pasado el proyecto SB 290, que busca eliminar la posibilidad de que estos estudiantes accedan a matrículas estatales reducidas en las universidades y colegios públicos de Florida.
Actualmente, el estado permite que los estudiantes indocumentados que cumplan ciertos criterios puedan calificar para la matrícula estatal, lo que representa un ahorro significativo en comparación con las tarifas para estudiantes fuera del estado.
Florida, hogar de aproximadamente 1,2 millones de inmigrantes indocumentados, según el Pew Research Center, permitió hasta ahora que estos estudiantes accedan a la educación superior con ciertas facilidades. Durante el ciclo escolar 2023-2024, alrededor de 6.500 estudiantes indocumentados recibieron exenciones para evitar pagar la matrícula fuera del estado, según datos del Florida Policy Institute.
Impacto en universidades y estudiantes
El proyecto SB 244 se dirige específicamente a universidades públicas con tasas de aceptación inferiores al 85 %, lo que incluye a algunas de las instituciones más prestigiosas y competitivas del estado. Según datos de admisión citados por AP, universidades como la Universidad de Florida y la Universidad Estatal de Florida podrían verse directamente afectadas. Estas instituciones, que ya enfrentan una alta demanda, tendrían que ajustar sus políticas de admisión para cumplir con la nueva legislación si esta es aprobada.
La propuesta ha generado preocupación entre defensores de los derechos de los inmigrantes y expertos en educación. Gaby Pacheco, directora de la organización nacional TheDream.US, que otorga becas a estudiantes inmigrantes sin autorización legal, calificó la medida como “dañina” y “contraproducente”.
En declaraciones recogidas por AP, Pacheco señaló que estas políticas podrían tener un impacto negativo en las comunidades locales y en el sistema educativo del estado. “Estamos fallando en reconocer el impacto que tendrá cuando se excluya a personas que han vivido aquí durante 10, 15 años. Este es su hogar”, afirmó.
Precedentes en Estados Unidos
A nivel nacional, solo tres estados prohíben actualmente que los estudiantes indocumentados se inscriban en ciertas universidades públicas, mientras que la mitad de los estados permiten que califiquen para matrículas estatales, según el National Immigration Law Center.
Florida, que hasta ahora fue relativamente accesible para los estudiantes indocumentados en comparación con otros estados, podría unirse a la lista de estados con restricciones más severas si las propuestas de Fine se convierten en ley.
El debate sobre la educación y la inmigración en el estado se enmarca en un contexto político más amplio. Según AP, el gobernador Ron DeSantis convocó una sesión legislativa especial para implementar políticas alineadas con las promesas de inmigración del expresidente Donald Trump, quien abogó por una postura más estricta en materia migratoria.
DeSantis, quien también ha impulsado su propia agenda antiinmigración durante su campaña presidencial, ha señalado que estas medidas son necesarias para eliminar incentivos que podrían alentar la inmigración ilegal al estado.
Reacciones y desafíos políticos
Aunque el proyecto de ley SB 244 fue presentado como parte de un esfuerzo por reforzar las políticas migratorias en Florida, no ha estado exento de críticas, incluso dentro del propio Partido Republicano. Según AP, algunos líderes republicanos en la legislatura estatal han calificado la convocatoria de la sesión especial como “prematura” e “irresponsable”.
Por su parte, Fine, quien también está en campaña para ocupar un escaño en el Congreso en reemplazo de Mike Waltz, expresó su apoyo a las políticas de Trump, pero ha cuestionado la falta de preparación para la sesión especial convocada por DeSantis.
“Si quieres convocar una sesión especial, dame los proyectos de ley que quieres que vote”, declaró Fine. A pesar de estas tensiones internas, el senador ha dejado claro que, si es elegido para el Congreso, otro legislador asumirá el patrocinio de sus propuestas legislativas en Florida.