El 20 de enero de 2025 no será un día cualquiera en Estados Unidos. En esa fecha, mientras Donald Trump asume su segundo mandato presidencial en un feriado conocido como el Día de la Inauguración, el país también conmemorará el Día de Martin Luther King Jr., una festividad que simboliza décadas de lucha por la justicia social y la igualdad racial. La coincidencia de ambos eventos ofrece un contraste poderoso: la continuidad del liderazgo político y la celebración del legado de un hombre que cambió la historia sin ocupar ningún cargo público.
El próximo lunes en Washington D.C, a las 12 p.m (hora local), el mandatario electo Donald Trump pronunciará el juramento presidencial, seguido de un discurso inaugural en el que se espera que destaque las prioridades de su nueva administración. La ceremonia estará acompañada por un programa artístico que incluye la participación de artistas como Carrie Underwood, quien interpretará “America the Beautiful”, y otros como Lee Greenwood y Christopher Macchio, respaldados por el Coro de las Fuerzas Armadas y el Club Coral de la Academia Naval de EE.UU.
Después del evento en el Capitolio, el tradicional desfile inaugural recorrerá la Avenida Pensilvania, llevando al presidente y a la vicepresidenta J.D. Vance hacia la Casa Blanca. Se espera la asistencia de miles de personas en áreas públicas designadas, aunque las restricciones de tráfico y los altos niveles de seguridad marcarán la jornada. No obstante, a la par de este evento, el resto del país disfrutará del feriado en honor a uno de los activistas más laureados de la nación.
¿Cuál es el origen del Día de Martin Luther King?
El camino hacia el Día de Martin Luther King Jr. comenzó apenas cuatro días después de su asesinato, el 4 de abril de 1968, cuando el congresista John Conyers presentó un proyecto de ley para establecer el feriado federal. Sin embargo, el proyecto se estancó durante años, enfrentando la indiferencia de muchos legisladores y la oposición directa de algunos que alegaban el costo de un día feriado adicional y la falta de precedentes para honrar a ciudadanos privados, según lo narrado por el Museo de Historia y Cultura Afroamericana.
El movimiento ganó fuerza en 1980 gracias al músico Stevie Wonder, cuya canción “Happy Birthday” se convirtió en un himno para la causa. Ese mismo año, Wonder lideró una marcha de 500.000 personas en el National Mall, junto a Coretta Scott King, viuda de King, para exigir que el Congreso aprobara la ley. En 1983, el proyecto finalmente superó los obstáculos legislativos, a pesar de los intentos del senador Jesse Helms por desacreditar a King mediante un expediente de 400 páginas que lo vinculaba falsamente con el comunismo, según el National Constitution Center.
Aunque el feriado fue reconocido a nivel federal en 1986, su adopción en los estados fue un proceso lento y lleno de controversias. Según el Museo de Historia y Cultura Afroamericana, Arizona enfrentó una de las mayores resistencias, perdiendo incluso la sede del Super Bowl en 1993 después de que sus votantes rechazaran el feriado en un referéndum en 1990. Finalmente, fue aprobado en 1992. En Carolina del Sur, los empleados estatales no recibieron el día libre hasta el año 2000, convirtiéndose en el último estado en reconocer plenamente el feriado.
Valores del Día de Martin Luther King Jr.
Más allá de honrar a King, el día está diseñado para inspirar acción comunitaria y promover los valores de no violencia, justicia social y dignidad humana. Desde 1994, gracias a la Ley de Servicio del Día de Martin Luther King Jr., esta fecha se ha convertido en un llamado a transformar las comunidades a través del voluntariado. Según el King Center, el objetivo es que sea “una jornada de acción, no de descanso”, una oportunidad para reflejar y actuar en el espíritu de King.
La Oficina de Publicaciones del Gobierno de Estados Unidos destaca que este día también busca conmemorar “los valores de verdad, justicia y servicio” que definieron el liderazgo de King. Su ejemplo de resistencia pacífica y amor incondicional sigue inspirando a generaciones y orientando debates sobre derechos civiles en el siglo XXI.
En raras ocasiones, como este año, el Día de Martin Luther King Jr. coincide con el Día de la Inauguración presidencial. Según la Architect of the Capitol, la Enmienda 20 de la Constitución fija el 20 de enero como inicio de cada mandato presidencial, lo que inevitablemente lleva a esta coincidencia periódica. Hoy, el Día de Martin Luther King Jr. no solo honra la vida y el trabajo de un líder excepcional, sino que también sirve como un recordatorio de la importancia del servicio comunitario y la lucha por la igualdad.