El ex presidente y candidato republicano Donald Trump reclamó que el debate televisado la noche del martes con su rival demócrata Kamala Harris en la cadena ABC News fue “armado” en su contra, aunque sin aportar pruebas de ello.

“Armaron un acuerdo, como imaginé que pasaría. Se ve en el hecho de que corregían todo, pero no la corregían a ella”, declaró Trump este miércoles a la cadena de derecha Fox News.

Trump también arremetió contra la cantante y superestrella Taylor Swift por su apoyo a Harris. “No he sido fan de Taylor Swift... Ella es muy liberal. Parece que siempre respalda a los demócratas y probablemente lo pagará con sus ventas en el mercado”, aseveró.

Minutos después del debate, Swift expresó que votaría por la actual vicepresidenta “porque lucha por los derechos y las causas que creo que necesitan una guerrera que las defienda”. El texto fue acompañado de una foto suya con un gato y firmado como “mujer con gatos sin hijos”, en un gesto sarcástico hacia el insulto formulado por el candidato vicepresidencial republicano J.D. Vance que describió así a Kamala Harris.

Hasta el martes, Swift había mantenido silencio sobre este tema a pesar de que muchos de sus seguidores empezaron a organizarse tras el movimiento de “Swifties por Kamala” y recaudaron más de 150.000 dólares para la demócrata.

Ambos candidatos declararon su victoria en el debate tras enfrentarse cara a cara por primera vez en la noche más importante de la campaña hasta la fecha, aunque es poco probable que las encuestas reflejen un aumento o una disminución del apoyo hasta dentro de varios días.

El debate en Filadelfia estuvo salpicado de tensos intercambios, con Harris que acorraló a Trump y el republicano la acusó de inacción.

Tras sustituir a Biden como candidato en julio, Harris se montó en una ola de entusiasmo durante la convención demócrata que impulsó su popularidad y le proporcionó cifras récord de recaudación de fondos.

Y con Biden fuera, Trump, de 78 años, se encuentra como el candidato que se enfrenta a preguntas sobre su avanzada edad, con un renovado enfoque en sus a menudo excéntricos discursos.

Pero Harris, de 59 años, había visto cómo su impulso en las encuestas empezaba a estancarse antes del debate.

La vicepresidenta demócrata y su rival republicano están empatados en las encuestas nacionales y en las de los estados indecisos, días antes de que se envíen por correo las primeras papeletas y comience la votación anticipada en persona en varios estados clave.

Este miércoles, volvieron a cruzarse cuando asistieron a las ceremonias en Nueva York que conmemoraban el 23 aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001 perpetrados por Al Qaeda. Se estrecharon la mano en un breve intercambio al margen de la conmemoración.

Harris se dirige el jueves a Carolina del Norte, uno de los pocos estados en los que se espera que se decida la elección, donde ha recortado una ventaja de seis puntos a Trump para empatar.

Trump tiene previsto salir a escena el jueves en Tucson, Arizona, centrándose en “nuestra economía en dificultades y el aumento del costo de la vivienda”.

El compañero de fórmula de Harris, Tim Walz, viajará a Michigan y Wisconsin de jueves a sábado, mientras su homólogo republicano, J.D. Vance, lidia con las consecuencias de otra ronda de polémicas declaraciones.