
El buen tiempo y las vacaciones están a la vuelta de la esquina, y quien se esté planteando organizar un viaje ya está empezando a buscar cuál va a ser su próximo destino. Algunos de los más elegidos son las ciudades europeas, sobre todo aquellas con un clima envidiable, una rica historia y una gastronomía exquisita a precios para todos los bolsillos. Todas estas características las cumple una ciudad del sur de Italia, situada en el corazón del Mediterráneo, que está ganando rápidamente popularidad.
Esta ciudad, Bari, está ubicada en la región de Apulia, en el sureste de Italia. Esta localidad, situada en el “tacón de la bota” italiana, es un destino que ha ido ganando popularidad gracias a su oferta accesible, tanto en términos de gastronomía como de alojamiento y actividades culturales. Bari está emergiendo como una excelente alternativa para aquellos que desean explorar Italia sin los altos precios de otras ciudades turísticas.
Clima mediterráneo y paisajes inolvidables
Uno de los principales atractivos de Bari es su clima privilegiado. Tal y como ha publicado el Diario As, la ciudad cuenta con aproximadamente 300 días de sol al año. Allí, los turistas pueden disfrutar de un tiempo insuperable durante todo el año. Las temperaturas suaves, especialmente durante la Semana Santa que está al caer, permiten recorrer la ciudad cómodamente, sin el calor extremo que suele caracterizar a otras zonas del Mediterráneo. El paisaje de Bari, adornado por campos de olivos, viñedos y almendros, crea una estampa ideal para quienes buscan relajarse en la naturaleza.
Además, la ciudad cuenta con unos monumentos históricos impresionantes, como la Catedral de Bari y el Castel del Monte, junto con playas de aguas cristalinas que se extienden por toda la región. Para quienes disfrutan de la historia, Bari ofrece también las ruinas de Egnazia, todos ellos con entradas a precios muy accesibles que rondan entre 4 y 8 euros.

Gastronomía y vinos a precios irresistibles
La gastronomía local es otro de los grandes atractivos de Bari. Los restaurantes de la ciudad permiten disfrutar de una comida deliciosa, por menos de lo que costaría en otras ciudades italianas. Una comida típica en un restaurante local se puede disfrutar por entre 8 y 12 euros, lo que incluye especialidades como mariscos frescos y carnes a la parrilla. Los vinos locales, perfectos para acompañar estos platos, están disponibles a partir de 5 euros por botella.
El ambiente gastronómico de Bari no solo se limita a los restaurantes, sino que la ciudad también cuenta con mercados y pequeñas trattorias donde los visitantes pueden experimentar la verdadera esencia de la cocina apulina. La mezcla de sabores frescos y productos locales convierte a Bari en un destino gastronómico al alcance de todos.
Alojamiento para todos los bolsillos
Bari también ofrece una amplia variedad de opciones de alojamiento para todo tipo de turistas. Para quienes buscan una experiencia económica, las pensiones y hoteles de 2 y 3 estrellas tienen tarifas desde los 40 euros por noche para dos personas.
Si se busca una opción más auténtica, es posible hospedarse en los tradicionales Trulli, las viviendas de piedra con techos cónicos que son un emblema de la región, con precios a partir de 80 euros por noche. Esta diversidad de opciones hace que Bari sea accesible tanto para los viajeros con presupuestos ajustados como para aquellos que prefieren experiencias únicas.